Fundado en 1910
William Levy, uno de los actores de la telenovela Café con aroma de mujer

William Levy, uno de los actores de la telenovela Café con aroma de mujerAntena 3

El Hormiguero

La dieta que el actor de moda 'aconseja' a Motos: «Vete a Cuba unos meses y vas a regresar flaquísimo»

William Levy recuerda en El Hormiguero las penurias que pasó en su país hasta que se pudo ir a los 15 años

Los teléfonos de los jefazos y los currantes de El Hormiguero llegaban unos días sonando a todas horas reclamando pases para acudir al plató del programa. ¿El motivo? La presencia de William Levy, el actor de moda, que tiene revolucionado al sector femenino

Es el protagonista de Café con aroma de mujer, la telenovela de 88 capítulos que se estrenó en Netflix el pasado diciembre y en enero ya había sido vista por cien millones de personas.

El rodaje es muy exigente: «Comienza a las siete de la mañana y son doce horas al día de lunes a sábado». Lo peor fue que mientras él rodaba en Colombia su hijo tuvo un accidente y «no pudo caminar por muchos meses».

Su siguiente proyecto será el rodaje en diversos lugares de España de El conde de Montecristo.

Motos se suele reunir con sus entrevistados previamente en su despacho. ¿De qué charló con Levy en esa previa? «Nos metimos una hora hablando de gimnasios, cómo mantenernos en forma, y qué comer, qué no comer. Si quieres estar en forma vete a Cuba unos meses y vas a regresar flaquísimo», comentó ya en directo. «En Cuba pasé quince años haciendo dieta obligado por el Gobierno», remarcó avanzada la entrevista.

El presentador le preguntó si llegó a pasar hambre. Levy se carcajeó. «No había nada. Te daban un pan al día por persona. Y un cuarto de pollo por persona al mes, y no podíamos comprar más aunque tuvieses dinero», recordó su infancia, que transcurrió en el llamado «período especial» cubano, que arrancó tras la caída de la URSS a comienzos de los años 90.

Contó que en la ciudad no te dejaban criar animales, bajo amenaza de cárcel, pero que las familias que se arriesgan y tenían cerdos escondidos en las bañeras, para sacrificarlos y comerlos el 31 de diciembre. «Ahora, cabe mencionarlo, estamos igual, en un período especial muy difícil, sin comida y sin nada», remarcó el actor de moda.

Otra historia de ese tiempo fue cuando el Gobierno anunció que se daría un pollo por persona al mes: «Yo fui para allá, a buscarlo. ¡Era un pollo chiquitico, para criarlo! Éramos siete en la casa y nos dieron siete chiquitos para criarlos». La autoridad castrista informaba de que al pollo se alimentaba con pan mojado y que había que mantenerlo bajo un foco. Pero el asunto es que no le iban a dar el único pan que tenía para comer. Y que el foco sin electricidad no funciona. «De los siete pollos se murieron seis. Y el que se quedó era la mascota de la casa, era familia, tenía nombre y todo», rememoró entre risas.

Marcha a los 14 años

A los 14 se jugó la vida para salir de su país: «Lo intenté y me fue mal», recordó. Al año siguiente lo logró: «Gracias a Dios, mi padrastro era preso político y Estados Unidos nos dio asilo y tuvimos la suerte de salir como refugiados políticos de Cuba y emprender una vida llena de oportunidades, de perseguir el sueño que tenía».

«En Cuba vives muchas carencias, pero lo más duro es que te quiten el regalo que Dios te da que es la libertad. Es un poco difícil vivir en un lugar en el que tú sabes que te puedes esforzar y esforzar, y dar todo, lo mejor de ti, y no avanzar, no tener futuro», se extendió.

Lo primero que hizo al llegar a Estados Unidos fue devorar una manzana: «En Cuba no había».

comentarios
tracking