El simbólico número que Manuel Carrasco juega en la Lotería

Mañana es el Día de Cupido para Manuel Carrasco. Sale a la venta Corazón y flecha. Es su nuevo disco. «Este disco es una parte de mí, que he trabajado muchísimo, que lo he sufrido… Miles de desvelos. Está mi vida entera aquí porque además he viajado hasta mis orígenes para poder sacar en profundidad lo que quería. Cuanto ya tienes una carrera de muchos años y te pones ante el vértigo de hacer un nuevo disco para seguir convenciendo de nuevo al público, da mucho miedo, da mucho vértigo. Pero creo que lo he conseguido, porque le he puesto todo mi corazón», contó a Pablo Motos en El Hormiguero.

Viene de un enorme éxito. La anterior gira la cerró en el estadio de La Cartuja ante 74.435 personas. «Yo antes de llegar ahí, para que entiendas la dimensión de cómo yo siento eso, recuerdo que cuando mi padre venía de la mar, me llevaba al mostrador del bar, y me hacía casar unos fandanguillos. Yo pasaba el plato, así de coña, con los amigos. Luego empecé a contar con los amigos del barrio, en un local de redes, a la luz de las velas. Seguidamente, empecé a tocar en alguna salita. Entré en un programa, como todos sabéis, multitudinario, donde tocamos en sitios más grandes. Luego volví a esa parte un poco más pequeñita, donde sentí de alguna manera lo que era el fracaso. Venía muy poquita gente y, con los años, llega uno a un escenario así, a conseguir algo así tan bestia… Es casi imposible expresarlo con palabras. Pero en mi vida había sentido algo tan, tan, tan emocionante, tan de verdad, sentirme tan vulnerable y tan fuerte a la vez», rememoró el artista, que se dio a conocer en Operación Triunfo.

Ese concierto se lo dedicó a su jefe de seguridad. Explicó el motivo: «Yo había ido a muchos conciertos al estadio de la Cartuja como público. Yo ya siendo conocido… Y recuerdo un concierto de Bruce Springsteen donde estaba arriba de todo. Y la gente me decía: '¿tú que haces aquí?'. A ver si un día tocas aquí… José Antonio era un seguridad que no solo viene en mi gira, sino en otras tantas giras. Él me vio y me dijo 'Manuel, ven para aquí, que te voy a colar'». Lo llevó para las filas delanteras: «Casi toco a Bruce Springsteen». En ese trayecto le pidió que se diese la vuelta: «¿Ves todo lo que está aquí? Esto lo vas a llenar un día tú». «Venga ya, ni por asomo», respondió. «El día que hice ese concierto José Antonio era el jefe de seguridad. Él me hizo creer y se lo dediqué a él», contó emocionado. Springsteen actuó en ese recinto sevillano en 2009 y 2012. El onubense lo hizo el pasado junio.

74.435. «Lo jugamos a la Lotería. Es una coña de esta gente de la oficina. Te voy a traer uno para ti y para todo el equipo, a ver si nos toca», anunció el cantante andaluz, que confesó ser muy despistado. Una vez se dejó el máster de un disco suyo, que aún no había sido publicado, en el coche. El problema es que lo dejó sonando a todo volumen. Nadie lo robó. El móvil lo perdió hace poco. «Todo lo pierdo… Se me van las letras de los conciertos. La gente lo sabe que se me va tela… Me las invento, me busco la vida».