Disney despide a la directora de su oficina de diversidad tras el fracaso de La Sirenita

Tras seis años trabajando para Disney, Latondra Newton dejará su cargo como directora del departamento de diversidad de la compañía. Aunque Newton ha asegurado que su marcha es voluntaria, algunos medios especializados señalan que podría tratarse de una decisión corporativa tras el fracaso en taquilla de la nueva versión de La Sirenita. Su marcha de la compañía fue anunciada en un memorando interno firmado por la directora de recursos humanos de Disney, Sonia Coleman.

Newton ocupó el cargo de directora de diversidad hace seis años. Desde entonces, Disney ha llevado a cabo diversas acciones por consejo de ese departamento. En 2022, el parque Disney de Orlando protagonizó titulares al sustituir el habitual saludo de su espectáculo nocturno de fuegos artificales –«damas y caballeros, niños y niñas»– por uno en el que no se menciona el género de los interlocutores. En el parque Disney de París, la compañía también llevó a cabo algunos cambios en ese aspecto: alteró el mensaje de la atracción Phantom Manor y realizó una prueba piloto de baños de género neutro.

En el comunicado interno se aseguraba que Newton había decidido abandonar su cargo para «dedicarse a otros proyectos» como unirse a una junta corporativa y centrarse en una empresa creativa de la que es propietaria.

Pero lo que ha llevado a la salida de Latondra de Disney no han sido estas iniciativas, sino los fracasos en taquilla que Disney parece achacar a su departamento de diversidad. Desde Un mundo extraño, que incluía al primer personaje abiertamente homosexual de Disney– al más reciente versión de La Sirenita, donde la joven sirena es interpretada por la actriz negra Halle Bailey. La cinta se promocionó durante más de un año y fue objeto de un fuerte debate público sobre la revisión de clásicos del cine.

A pesar de la polémica y la especial atención publicitaria que recibió, al llegar a taquilla se estrelló: según el medio especializado Deadline, La Sirenita debía recaudar más de 560 millones de dólares para que Disney la considerara rentable. Cerca de dos meses después de su estreno en cines, la cinta ha recaudado algo más de 477 millones de dólares, más de 100 millones menos de lo esperado.