La pasividad de Fortes en la entrevista de TVE a Sánchez

La entrevista a Pedro Sánchez en TVE, como se esperaba, distó mucho de asemejarse a un interrogatorio, como sí se parecen las entrevistas a representantes del PP y VOX en programas como La Hora de La 1, presentado por Silvia Intxaurrondo y Marc Sala, y en La Noche en 24 H, el espacio de Xabier Fortes, quien ejerció de poli bueno con Sánchez en la entrevista al presidente del Gobierno. El papel de poli menos buena –que no mala– lo desempeñó Marta Carazo que, sin llegar a mostrarse especialmente incisiva, por lo menos formuló alguna pregunta ligeramente incómoda para Sánchez… y para Fortes, que miraba inquieto a su compañera cuando lanzaba las cuestiones menos amables para el presidente.

Por ejemplo, cuando Carazo preguntó si había teatro o estrategia política en su decisión de parar y reflexionar durante cinco días. O cuando recordó a Sánchez que tanto él como su vicepresidenta, en sede parlamentaria, aludieron «a una supuesta ayuda a la mujer de Feijóo por una empresa en una información que después fue desmentida».

Sánchez, en cualquier caso, no pasó apuros en una entrevista dibujada prácticamente a su medida y en la que faltaron muchas preguntas que se hace gran parte de la ciudadanía. Esa a la que se dirigió Sánchez en su carta victimista, y a la que un ente público como RTVE debería dar servicio y descuida deliberadamente para, como la entrevista de anoche, no incomodar al presidente del Gobierno.

Faltó, también, una defensa de los periodistas y medios de comunicación por parte de Carazo y Fortes, que se apresta a defender a los compañeros y medios de su cuerda y en cambio se apalanca en la silla cuando las descalificaciones se dirigen a la derecha.

Esta vez no terminó Fortes su entrevista con Sánchez con un «bueno, muy bien, ¿no?», pero sí dejó su sello en el tramo final. Marta Carazo interrumpió al presidente del Gobierno y le pidió que fuera concreto. «¿Puedo desarrollar...?, preguntó Sánchez. Antes de terminar la frase, se escuchó un «sí, sí, sí, sí, sí. Debe». Era Fortes, pero sonó a Fernando Galindo, el personaje de José Luis López Vázquez en Atraco a las tres y su icónica frase: «Fernando Galindo, un admirador, un esclavo, un amigo, un siervo».

Las preguntas de Fortes y Carazo a Sánchez

—¿Cree que ha sido la mejor manera de abordarlo? (sobre los cinco días de meditación)

—¿Ese miércoles estaba dispuesto a dimitir?

—¿De qué estuvo más cerca, de marcharse o de quedarse?

—¿La carta es cosa suya? ¿No lo comenta con su mujer?

—¿Le ha llegado alguna crítica por haber sometido al partido a una tensión excesiva?

—¿Hay teatro, hay estrategia política? (en su pausa de cinco días).

—¿Va a usted a llamar al señor Feijóo para abordar esta situación? (dos veces se lo preguntó Carazo a Sánchez)

—¿En qué vamos a notar que se avanza en la regeneración democrática?

—Dentro de este proceso de regeneración democrática, ¿el Gobierno tiene pensado impulsar alguna medida legislativa para desbloquear el CGPJ?

—¿Qué tiene en la cabeza para proteger la veracidad de la información?

—¿Cree que debía haber hablado? (cuando informaciones falsas afectaban a Podemos)

—En esta defensa de la transparencia informativa, ¿por qué ha elegido una comparecencia sin periodistas?

—¿Cree puede acabar en algún tipo de investigación o imputación? (lo de su mujer)

—¿Cree que va servir para algo, que el debate va a ir por otros derroteros?

—¿Cree que se debería regular el papel de los/las consortes de los presidentes del Gobierno y, en esa regulación, cabría que el/la consorte de un presidente del Gobienro firmara una carta de recomendación a una persona que opta a una ayuda pública?

—¿Cree que está más fuerte o más débil?