Cine
Muere Shelley Duvall, la actriz de 'El resplandor' que abandonó el cine por el trauma que le causó la película
Ha perdido la vida a los 75 años en su casa de Texas por complicaciones derivadas de su diabetes
El mundo del Séptimo Arte vuelve a estar de luto con la muerte de Shelley Duvall. La icónica actriz que interpretó Wendy Torrance, la mujer de Jack Nicholson en El Resplandor, ha fallecido a los 75 años de edad, tal y como ha avanzado The Hollywood Reporter.
Así lo confirmaba su pareja, el director y guionista Dan Gilroy. «Mi querida, dulce, maravillosa compañera de vida y amiga nos ha dejado. Demasiado sufrimiento últimamente, ahora es libre. Vuela lejos, hermosa Shelley», manifestaba en un comunicado difundido por la web estadounidense. Según explicaba, la intérprete habría fallecido mientras dormía en su casa de Blanco (Texas) debido a las complicaciones derivadas de la diabetes que padecía desde hace años.
Su última aparición pública ya sembró la preocupación por su estado de salud. Fue en 2016 en el programa de entrevistas de Dr. Phil, ante quien reveló que también sufría varias enfermedades mentales, además de afirmar que Robin Williams seguía vivo –había muerto dos años antes– o que el sherrif de Nottingham quería matarla. «Estoy muy enferma. Necesito ayuda», declaró, reabriendo los debates sobre si el origen de sus dolencias eran en realidad consecuencia de las exigencias a las que estuvo sometida por Kubrick.
El director la tuvo casi un año al límite, teniendo que llorar a diario durante doce horas para hacer frente al papel. Además desarrolló alopecia por estrés, además de manifestar un estado anímico muy decaído por la presión de mantener a su personaje en un estado de histeria absoluta. La mítica escena del bate de béisbol, por ejemplo, se repitió 127 veces, haciendo que la actriz sufriese varias crisis nerviosas.
Conocida por sus expresivos ojos y su complexión delgada, Duvall abandonó Hollywood en el culmen de su carrera tras las cicatrices que le dejó la conocida película. Se mudó de nuevo a su Texas natal, donde fue descubierta por un agente mientras estudiaba para ser investigadora científica. Una vez en Hollywood, rápidamente, se convirtió en una figura prominente, debutando en Brewster McCloud en 1970.
Una década más tarde llegó el papel de Olivia Oyl, en la adaptación junto a Robin Williams de Popeye. Estaba dirigida por Robert Altman, pero no fue la única película que le unió al director. Se convirtió en su musa y se sumó como parte del elenco en producciones como McCabe & Mrs. Miller, Thieves Like Us y 3 Women, donde se alzó con el premio a la mejor actriz en el Festival de Cannes.
Su desconcertante interpretación de la trabajadora de un spa en esta película fue lo que llevó a Kubrick a escogerla para la suya. También destacaron sus papeles en filmes como Annie Hall, Time Bandits y Roxanne, aunque con ninguno de ellos destacó tanto como interpretando a la inolvidable Wendy Torrance.
Tras una larga vida alejada del star system, Duvall volvió a ponerse delante de una pantalla en 2022, cuando participó en The forest Hills, un thriller de terror dirigido por Scott Goldberg y cuya trama sigue a un hombre que es atormentado por visiones de pesadilla tras sufrir un traumatismo craneal mientras acampaba en los bosques de Catskill.
En el terreno personal, su vida ha estado marcada por su historia de amor con el músico Paul Simon, que la abandonó por su amiga Carrie Fisher (Princesa Leia en Star Wars), a la que ella misma le había presentado. Superada la tristeza del engaño y la ruptura, conoció a Dan Gilroy, con quien ha estado casada hasta su fallecimiento.