Disney se agarra a la letra pequeña de la suscripción a Disney+ para no ir a juicio por la muerte de una mujer

Kanokporn Tagnsuan, una doctora que trabajaba en un hospital de Nueva York, murió el pasado octubre a los 42 años como consecuencia de una anafilaxia sufrida mientras cenaba en un restaurante de Disney Springs, el centro de ocio situado junto al parque temático de Disney en Orlando (Estados Unidos). La mujer, que cenó junto a su marido y su suegra, había advertido en varias ocasiones a los camareros de su alergia a los frutos secos y los lácteos, según refleja la querella contra la compañía, pero al salir del restaurante sufrió una aguda reacción alérgica que le causó la muerte pocas horas después.

El viudo, Jeffrey Piccolo, demandó a Disney por la muerte de su esposa y solicitó 50.000 dólares como indemnización. Según el New York Post, la compañía ha recurrido a una cláusula del contrato de suscripción a Disney+ que el hombre, como tantos otros suscriptores a la plataforma, aceptó años atrás, para intentar que la demanda quede desestimada.

Según uno de los apartados del contrato de suscripción a Disney+, al crear una cuenta, el consumidor renuncia al derecho a la celebración de un juicio con jurado ante cualquier conflicto legal con la compañía o con cualquier empresa subsidiaria. Disney entiende, refugiándose en esa cláusula, que el viudo no puede llevar a juicio a la compañía y que el litigio debe resolverse por medio de un arbitraje privado. El abogado de Jeffrey Piccolo ha calificado la petición de desestimación de la demanda por parte de Disney como «absurda e indignante».