Arte
Banksy y la alegoría del consumismo: se revende su obra autodestruida por 21 millones de euros
«Niña con globo», renombrada por el artista británico como «El amor está en la papelera», fue triturada en directo por un mecanismo oculto tras ser subastada en 2018 por 1,2 millones de euros.
Fue una alegoría social su creación, lo fue su venta y también su destrucción. Ahora, su reventa ha convertido Niña con globo en la meta-metáfora: y es que el famoso grafiti de Banksy que muestra a una niña dejando escapar un globo en forma de corazón acaba de venderse por 21 millones de euros. Lo ha hecho con récord y con nuevo título: El amor está en la papelera.
Además de una crítica a la hipervigilancia y al control social, Banksy entiende el arte urbano como una sátira sobre el capitalismo y la sociedad de consumo. Por eso el 5 de octubre de 2018, cuando el famoso grafiti se vendió en subasta por 1,2 millones de euros, comenzó su autodestrucción. Sin embargo, el proceso de destrucción se detuvo a la mitad por un fallo del sistema que, según afirmó el artista en su Instagram, “funcionaba siempre en los ensayos”. Banksy explicó en un vídeo cómo había instalado la trituradora y, citando a Picasso, lo justificó: “El impulso de destruir es también un impulso creativo”.
Tres años después, la obra semidestruida y rebautizada ha alcanzado un récord histórico de venta: los 21 millones de euros han superado con creces el precio estimado, entre 4 y 6 millones según Sotheby's, encargada de gestionar la puja. «Esta obra es, sin duda, el trabajo más grande de Banksy hasta la fecha», han dicho en la casa de subastas, encargada de organizar también la de 2018. Ahora la obra incluye también el acto performático de su destrucción, la primera que se producía en el transcurso de una licitación pública. Un acto que quería denunciar la mercantilización del arte y que, paradójicamente, ha logrado su revalorización.
Creación, adaptación, destrucción y recreación han dado lugar a la obra más polémica del desconocido artista, que oculta su identidad y que comenzó a hacer grafitis en las calles de Bristol en la década de los 90, cuando empezó a llamar la atención por su tono satírico al abordar temas como la lucha de clases, la inmigración y el consumismo. De hecho, Niña con globo fue primero un grafiti en la calle de Great Eastern, donde apareció en 2002. La versión subastada en 2018 fue una trasladación, realizada con aerosol y acrílico sobre lienzo.
Banksy es uno de los 20 artistas más cotizados del mundo. Su segunda obra más valiosa es El que cambia el juego, una pintura creada para recaudar fondos para el sistema de salud inglés tras la pandemia, que fue vendida el pasado mes de marzo por 19 millones de euros. El tercer puesto lo ocupa Parlamento transferido, un lienzo con la imagen de la inglesa Cámara de los Comunes llena de chimpancés, que se vendió por cerca de 11 millones en 2019.