Ada Colau coloca a sus delfines en Cultura: después de Urtasun, Jordi Martí secretario de Estado

Llama la atención (o ya no) que sea otro catalán el elegido para tomar las riendas del ministerio de Cultura. Pero llama aún más la atención que sea un activista ecologista cuya actividad, exclusivamente política, haya estado alejada completamente de los asuntos culturales. En lo único que hay relación, y negativa, es que es un enemigo de uno de los pilares de la cultura española: la tauromaquia.

No se entendería que un activista antitaurino sea ministro de Cultura sino estuviera Yolanda Díaz de por medio, que ya fue la responsable de no incluir los toros en el bono cultural. Yolanda Díaz y Ada Colau, compañeras de fotos y afanes, esta última una especie de tutora del nuevo ministro y de su segundo, el nuevo secretario de estado de Cultura Jordi Martí, procedentes de la plataforma, Barcelona en Común, que llamaba a la rebelión democrática y a reapropiarse de las instituciones.

Originario del PSC, como Iceta, se marchó para unirse a las escisiones donde medró Colau, desde el activismo por los desahucios y las hipotecas (anteriormente se disfrazó de abeja o algo parecido) para hacerse con la alcaldía de Barcelona donde Martí fue su hombre de Cultura y de confianza. Según informa El País, la vicepresidenta Díaz ofreció directamente el ministerio a Colau, pero esta lo rechazó. El resultado: Urtasun ministro y Martí secretario de Estado.

Activista antitaurino y catalanista

Las escisiones de la exalcaldesa de Barcelona para tomar un ministerio que pocas veces estuvo tan politizado en origen. Sin responsables que representen a la cultura española, alejados de ella, también el caso de Martí, ejerciente hasta el momento como gestor de cultura exclusivamente catalana. Un activista antitaurino y un gestor cultural catalanista van a dirigir el ministerio de Cultura español, con la inquietante sombra de Díaz (y Colau, la primera elección) sobre ellos.