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Imagen de Primera sangre de María VelascoCDN

El Nacional de Literatura Dramática premia el aborto, la promiscuidad, el medioambiente o el feminismo radical

María Velasco, escritora y dramaturga, tiene un largo y perfecto currículum para lo que parece la hoja de ruta ideológica del Ministerio de Cultura

La dramaturga y escritora María Velasco ha ganado el Premio Nacional de Literatura Dramática. Su carrera se halla repleta de todos los ingredientes del arte moderno que se estila, al que se da reconocimiento y visibilidad desde las instituciones y el mundillo, donde la ideología es el pan (y el hambre) de cada día.

Vibraciones

En La Gran Belleza de Paolo Sorrentino su protagonista, el periodista y prometedor novelista en su juventud, Jeb Gambardella, realiza una entrevista a una artista conceptual que desnuda sobre una pasarela que da al acueducto romano corre hacia él para golpearse en la cabeza y decir a continuación: «¡No os quiero nada!».

En la entrevista, en la tienda de campaña donde vive la artista de performance, Gambardella le pregunta qué significan las vibraciones con las que describe su «arte», y ella le responde que no se pueden describir las vibraciones con la vulgaridad de las palabras. A partir de ahí el entendimiento es imposible, porque el discurso de la artista es totalitario y las preguntas del periodista carecen de posible respuesta desde el sentido común más básico.

La escena es una crítica corrosiva y certera a lo que es hoy el mundo del arte que la ganadora del Premio Nacional de Literatura Dramática 2024, María Velasco, representa casi a la perfección. Una artista premiada por unos responsables gubernamentales culturales que buscan subvertir todos los órdenes culturales y sociales donde abundan las contradicciones de las supuestas inspiraciones cuya fealdad, para un supuesto arte, llega a impresionar, aunque ya, después de todo, ya no tanto.

La lista de los Premios Nacionales de Cultura dados hasta el momento en 2024 muestran un patrón que es como una marmita de donde beben la poción mágica de lo «woke» los premiados. María Velasco es una autora multipremiada que en 2022 ganó un Premio Max con su obra Talaré a los hombres de sobre la faz de la tierra, un «empoderamiento por lo verde». No hace falta decir mucho más, aunque lo haya, sobre hacia donde se dirige, sin rumbo fijo, pero en dirección clara, la obra de Velasco.

Alienígenas y porno

Talaré a los hombres... es un relato sobre una mujer que visibiliza la violencia sobre el cuerpo y el territorio. Conceptos como ecofeminismo o arboricidio se mezclan con el cuerpo de la mujer, el feminismo, el placer... la prostitución es otra de sus inspiraciones. María Velasco comparte mensajes en redes sociales contra la Monarquía española, sobre obras que contienen alienígenas y porno en algún lugar de sus líneas o escenas.

Sobre la obra merecedora del Premio Nacional, Velasco ha escrito: «Expropiar y pervertir el género de fantasmas, convertirlo en un memorial. Y en el recordatorio de que las muertas por violencia machista son víctimas de terrorismo, un sistema de terror». Ensalza a Errejón. Aplaude la legalización del aborto en la Constitución francesa. Admira a Mélenchon.

Por supuesto Gaza y la «extrema derecha» está en su vocabulario habitual. También Isabel Díaz Ayuso. El colonialismo, el feminismo, «el miedo y la violencia instaurada en el cuerpo femenino», rezó el CDN sobre Primera Sangre, Premio Nacional de Literatura Dramática 2024, calificado como un «emotivo manifiesto». Conceptos en su obra como «fuga de cuerpos: el precariado sentimental y el nomadismo emocional».

Un orangután y Gisele Bündchen

Si en el árbol un Burka es otra de sus obras, dos monólogos que se entrecruzan. Uno es el de una hembra de orangután rescatada por una veterinaria vasca de un burdel donde sufría abusos sexuales y el otro es el de la modelo Gisele Bündchen, que usó un burka para ocultar sus operaciones de cirugía estética... Y así todo, Primera Sangre, de María Velasco, Premio Nacional de Literatura Dramática 2024, sin Gambardellas, todo lo contrario, que la dejen en evidencia.