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Sumergir la bandera colombiana en el Pacífico es otra de las iniciativas de la COP16

Sumergir la bandera colombiana en el Pacífico es otra de las iniciativas de la COP16AFP

El medioambientalismo ya no sabe qué inventar y pone a 40 pájaros a cantar el himno de Colombia

A falta de ideas efectivas, la COP16 volverá a limitarse a una sucesión de gestos simbólicos de nula efectividad

Se acerca la Cumbre del Clima COP16 de Cali (Colombia) y con ella es de esperar el regreso de los aquelarres medioambientalistas, ceremonias más pensadas para el espectáculo y la autorreferencialidad ideológica de la izquierda que para obtener resultados reales en la lucha contra el deterioro ecológico del planeta.

El foco volverá a estar sobre los países desarrollados, democráticos y libres de Occidente –precisamente en aquellos donde más medidas se han adoptado para luchar contra el cambio climático a cargo de sus castigados contribuyentes–, y se volverá a obviar que los principales contaminadores del planeta proceden de China, India, etcétera.

Es de esperar la presencia de la activista profesional Greta Thunberg y los numeritos de indignada climática aunque, enfrascada últimamente en la defensa de la causa palestina, bien podría dejar en un segundo plano la emergencia climática.

Por el momento, los organizadores de la COP16 ya nos han dejado una primera muestra de sus propuestas destinadas a resolver la crisis climática.

Se trata de un vídeo donde más de 40 pájaros de distintas especies, grabados en su hábitat salvaje, entonan el himno de Colombia. Según los argumentos de los responsables de la idea, con este vídeo se quiere subrayar que Colombia es el país con mayor biodiversidad de aves en el mundo, informó Afp.

El productor musical Miguel de Narváez, responsable del proyecto, declaró a Blu Radio que «hay más de 41 aves en este audio, más de tres anfibios, hay ranas, hay hasta un jaguar, tenemos capturada una ballena también en el Pacífico, que tienen un sonido increíble, capturamos también sonidos de la naturaleza, el viento, el mar y la lluvia para enriquecer mucho más el ambiente».

Para elaborar esta peculiar versión del himno colombiano, Narváez, junto a un equipo científico formado por biólogos, pasó diez días en varias regiones del Caribe, pacífico y de los llanos Orientales con micrófonos de alta tecnología con los que registraron los cantos y sonidos de las aves.

Esta versión del himno colombiano ya ha empezado a emitirse en algunos eventos previos a la apertura de la COP16, que se celebrará desde el 21 de octubre hasta el 1 de noviembre.

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