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Detalle de El hijo del hombre (1964) de René Magritte

¿Cuándo se usa el punto y coma, el signo de puntuación más subjetivo?

El punto y coma es uno de los signos de puntuación que más dudas genera en cuanto a su empleo

Opunto, o coma. Pero los dos a la vez parece que complica el asunto. Se supone que sirve para indicar una pausa en la lectura mayor que la coma y menor que el punto. También separa dos enunciados que si se separasen con punto quedarían demasiado alejados. Pongamos algunos ejemplos para ayudar a su correcta (y no del todo fácil) utilización:

Se usa delante de las conjunciones adversativas (pero, sin embargo...) cuando estas van a continuación de una frase muy larga: «Tenía ganas de visitar el colegio de su infancia, de ver cómo había cambiado todo sin cambiar nada a través de las décadas; pero no estaba seguro de si era una buena idea».

También para separar frases largas que se quiere hacer más independientes de lo que serían con una coma: «En el primer capítulo se cuenta la historia del protagonista; en el resto esta historia se entremezcla con los personajes secundarios».

Y para separar elementos de una enumeración en la que se utilizan comas: «En la primera planta de la biblioteca están los libros de poesía, narrativa, y biografías; en la segunda, los libros científicos».

Según el Diccionario panhispánico de dudas, también «Se pone punto y coma detrás de cada uno de los elementos de una lista o relación escrita en líneas independientes cuando estos presentan cierta complejidad y se inician con minúscula...».

Según la RAE, de entre los signos de puntuación, es «el que presenta un mayor grado de subjetividad en su empleo, pues, en muchos casos, es posible optar, en su lugar, por otro signo de puntuación, como el punto y seguido, los dos puntos o la coma; pero esto no significa que el punto y coma sea un signo prescindible».