¿Cuándo se usa «sino» y «si no»?
El primer ejemplo puede ser un nombre o una conjunción adversativa, y el segundo una combinación entre una conjunción condicional y un adverbio de negación
«Sino» es una conjunción adversativa y se escribe en una sola palabra. Mayormente se usa para contraponer una idea a otra: «No soy Pablo, sino Pedro», y también un sustantivo que significa «destino». «Si no» escrito en dos palabras (una conjunción condicional y un adverbio de negación) introduce una oración condicional: «Si no tienes ganas, no vayas».
La diferencia parece sencilla, pero no lo es tanto a la vista de los errores comunes y de las dudas habituales. Una simple regla para saber cuando se debe escribir «si no» es cuando entre ambas palabras puede intercalarse otra sin que la frase pierda su sentido original: «Si (tú) no tienes ganas, no vayas».
«Salvo» o «excepto»
La Fundéu es más explicativa y dice que se escribe en una palabra «Cuando contrapone una afirmación a algo previamente negado», «Cuando puede sustituirse por 'más que', 'otra cosa que', 'salvo', 'excepto', aparte de que se suele utilizar en preguntas retóricas como '¿Quién sino ellos podría haberlo hecho?' o en frases como 'Ese encuentro no hizo sino agravar las discrepancias'».
También «Cuando forma parte de la construcción 'no solo…, sino (también)': «No solo tengo razón, sino que es justo lo que digo» y cuando es sinónimo de «destino» o «fatalidad»: «La mala educación, el sino de los tiempos».
Según la Fundación del Español Urgente se escribe en dos palabras «cuando introduce una oración condicional negativa («Me enfadaré si no te portas bien»)» o «cuando equivale a 'en caso contrario' o 'de lo contrario', también con valor condicional negativo» («Espero que digas que sí, si no, te lo perderás»).