Activistas agreden a la nadadora que denunció la presencia de transexuales en el deporte femenino

Riley Gaines, nadadora de la Universidad de Kentucky (Estados Unidos), alzó la voz hace dos meses para denunciar el problema que existe en el deporte femenino por la presencia de personas transexuales.

Ella había competido contra Lía Thomas, la polémica nadadora 'trans' que puso en alerta al deporte al pasar de ser totalmente irrelevante en categoría masculina cuando era un hombre a arrasar y ganar competiciones en categoría femenina. Sabía bien de lo que habla. De ahí que reclamara atención contra los problemas que están dando «las políticas que afirman promover la inclusión».

«El número de deportistas femeninas a las que se les están negando oportunidades o que han sido traumatizadas o heridas por políticas que afirman promover la inclusión crece a un ritmo alarmante en este país», explicó en un discurso muy compartido en redes sociales.

Semanas después de aquél alegato que dio la vuelta al mundo, Gaines ha sido agredida por contar este testimonio, que repitió en otra reciente iniciativa en defensa del deporte femenino y la igualdad de competición. En concreto, la nadadora fue agredida por varios exaltados a favor del movimiento trans que «la dieron golpes varias veces», según ha contado su pareja.

Persecución

Riley Gaines, que contó entre lágrimas su experiencia compitiendo y compartiendo vestuario ante nadadoras transexuales, tuvo que encerrarse durante tres horas en una habitación ante el intento de asalto de sus agresores. Fue entonces cuando acudieron agentes de la policía que la sacaron del lugar entre abucheos e insultos de fanáticos que llevan además persiguiéndola desde que su discurso se hiciera mundialmente famoso.

En ese momento Gaines grabó la escena y la compartió en sus redes sociales, donde puso el foco en la campaña que está sufriendo por dar su testimonio como nadadora. «Un hombre me tendió una emboscada y me golpeó físicamente dos veces», cuenta la deportista, que desde entonces no puede vivir tranquila. «Cuando te quieran callar, habla más fuerte», añadió.

Todo sucedió después de otra charla en la que la nadadora contó su historia. Cabe recordar que Gaines puso varios ejemplos de la dificultad que tienen las mujeres para competir (fuera y dentro de la piscina) ante deportistas transexuales. Defiende que las políticas de la NCAA (la organización que se encarga de los programas deportivos universitarios en los Estados Unidos) habían llevado a una «exclusión de las deportistas femeninas».

A su última charla este grupo de manifestantes pro-trans cargaron contra ella. No querían que explicara su experiencia por competir contra Lía Thomas. «Los manifestantes abordaron violentamente a Riley, le gritaron, la agredieron físicamente y la encerraron en una habitación», cuenta la FOX en su crónica de lo ocurrido.

La Policía Universitaria de la Universidad Estatal de San Francisco –donde se produjeron los hechos– ha explicado que están «en investigación» y que no ha habido detenciones. Gaines lleva meses haciendo charlas de este tipo y es ya una figura conocida en Estados Unidos por su oposición a que mujeres que antes fueron hombres compitan en categoría femenina.

No les niega el derecho a competir, pero considera –como están ya diciendo la mayoría de federaciones deportivas– que no deben hacerlo en esa categoría donde las diferencias son desproporcionadas.