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Jon Rahm, durante la primera jornada del British Open

Jon Rahm, durante la primera jornada del British OpenEFE

La queja de Jon Rahm con el público del British Open: «Me sentía ignorado»

El golfista español se mostró algo enfadado por la forma en la que le trataron los aficionados y periodistas en la primera jornada del último major de la temporada

Jon Rahm llega a este British Open con la intención de ser el primer español en ganarlo desde Seve Ballesteros, que lo ganó en tres ocasiones (1979, 1984 y 1988). Además, en caso de coronarse en este mítico torneo que este año está celebrando su 151 edición pondría el broche de oro a una temporada en la que se hizo con el Masters de Augusta –torneo más prestigioso del mundo– y en el que está siendo uno de los mejores del año.

Sin embargo, las cosas no han empezado de la mejor manera posible para el número 3 del mundo. En la jornada inaugural el de Barrica vivió una día para olvidar y donde terminó frustrado con todo, desde las cámaras y micrófonos puestos en todas las zonas del torneo, hasta los aficionados, de los que se quejó por el comportamiento que tuvieron viendo el torneo.

Las quejas de Rahm

En un día donde la suerte no estuvo de su lado y que completó con una tarjeta de 74 golpes (3 sobre el par), lo que le sitúan muy lejos de los primeros puestos de la clasificación que lideran Christo Lamprecht, Tommy Fleetwood y Emiliano Grillo, el León de Barrika mostró su malestar por el trato recibido por prensa y aficionados.

«Había tanta gente siguiendo nuestro partido desde dentro que era difícil concentrarse; a veces yo estaba jugando y los comentaristas estaban a lo suyo, hablando con otras personas, como si yo no existiese. Vamos, que me sentía totalmente ignorado y tuve que recriminárselo varias veces», aseguró al término de la jornada.

Jon Rahm, durante la primera jornada del British Open

Jon Rahm, durante la primera jornada del British OpenEFE

Antes de hablar en rueda de prensa sobre lo poco que le había gustado el comportamiento de algunos periodistas y aficionados, Rahm ya estalló en plena partida. «Lleno de jodidas cámaras por todos lados», dijo mientras jugaba.

El campeonato, cuesta arriba

Este primer día podría haber acabado con las opciones de Rahm de hacerse con el título. El golfista vasco está ya muy alejado de los líderes de la clasificación (le llevan ocho golpes de ventaja) y tendrá que remar si quiere llegar al fin de semana con opciones, algo que no descarta.

«Esto es muy largo y todo pasa por hacer una buena segunda ronda, poner un resultado bajo en el casillero aprovechando que el turno de mañana será previsiblemente más favorable, y luego en el fin de semana ya se verá hasta dónde podemos llegar», concluyó.

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