La mofa del gran rival de Carlos Sainz que le salió mal: él se retiró y el español ganó el Dakar
Teniendo en cuenta la pobre participación de Sainz el año pasado, Nasser Al-Attiyah aseguró al principio del presente Dakar que el español no aguantaría ni tres días
Carlos Sainz, la gran leyenda del deporte español
Hay veces en las que es mejor quedarse callado. Y si no que se lo pregunten al catarí Nasser Al-Attiyah, uno de los corredores más laureados del Rally Dakar y uno de los máximos rivales de Carlos Sainz desde que el madrileño participa en esta carrera. La hemeroteca es muy traicionera y, para evitar quedar retratado, lo recomendable es guardarte ciertos pensamientos.
Al-Attiyah aseguró que le daba «tres días» de competición a los pilotos de Audi, en referencia a Carlos Sainz y a su compañero, el francés Stéphane Peterhansel, y añadió que después de esos tres días «se irían a casa», como «ya se vio en Marruecos y Aragón», por posibles problemas de fiabilidad del vehículo híbrido alemán.
Esas declaraciones tuvieron lugar al principio de la edición del 2024. Más concretamente el 4 de enero. Sainz no quería volver a repetir su mala actuación del 2023, donde se tuvo que retirar por lesión, y el piloto madrileño aterrizó en el desierto saudí con más dudas que certezas. Y eso se debió, en parte, a la fiabilidad del Audi. Al-Attiyah confiaba en ganar su tercer Dakar de forma consecutiva y, para ello, firmó un ambicioso contrato con la marca Dacia.
Las primeras etapas transcurrieron con normalidad. Todo apuntaba a un nuevo duelo entre Sainz y Al-Attiyah. Sin embargo, la maratón de 48 horas trastocó los planes del piloto catarí. El madrileño tiró de veteranía para cambiar la estrategia y, de una tacada, dejó atrás a Sébastien Loeb y al propio Al-Attiyah.
Ese adelantamiento afectó sobremanera al catarí. Y como se mencionó con anterioridad, hay veces en las que es mejor quedarse callado. Y once días después, el que se retiró del Dakar 2024 fue... ¡Al-Attiyah!. Esa afirmación le pasó factura al piloto nacido en Doha. Quien ríe último ríe mejor. Nasser Al-Attiyah cantó victoria antes de tiempo y fue él el que tuvo que abandonar por problemas de fiabilidad del motor de su vehículo.
El abandono del catarí tuvo lugar el día 15 de enero, en la octava etapa de 279 kilómetros que conectaba las ciudades saudíes de Ad Duwadimi y Ha'il. La retirada de la prueba supuso un jarro de agua fría para Al-Attiyah y, quién sabe, si ese día se fraguó el cuarto Dakar de Carlos Sainz.
Un problema que venía de lejos
La mecánica del Hunter T1+ no le ayudó a ello, después de sufrir dos pinchazos y una rotura de la suspensión trasera en la etapa 7; una rotura de motor en la etapa 8 y un problema mecánico, tras completar apenas un kilómetro este martes. Aun así, tenía un último comodín para reengancharse al rally.
«Hemos tenido un problema con el motor. De repente se ha parado, ha hecho un ruido enorme y nos hemos detenido inmediatamente. Desde el principio del rally hemos tenido problemas cada día. Voy a tener una reunión con el equipo porque no entiendo lo que está pasando», comentó Al-Attiyah.
«Soy piloto oficial, el campeón de las dos últimas ediciones y me pasan cosas que no sé por qué suceden. Todos los problemas los tengo yo. Tengo que saber por qué esto pasa en un coche y no en el otro. Entiendo que esto forma parte de las carreras pero algo no está funcionando como nosotros necesitamos. Somos dos grandes pilotos y tenemos que poder ayudarnos», concluyó el catarí al término de la octava etapa.