Cuando los deportistas fallan como empresarios: Ramos, LeBron y otros atletas que fracasaron en sus negocios

En los últimos tiempos, algunos de los deportistas más mediáticos y con mayor repercusión del mundo han decidido ir un paso más allá y se han atrevido a crear una vida paralela a través de los negocios, algo que les podrá servir una vez pongan punto y final a su carrera deportiva.

El problema es que hay veces que esas ideas no funcionan y lo que empezó siendo una ilusión acaba convirtiéndose en una pesadilla, en un quebradero de cabeza, llámenlo como quieran. Por unas cosas u otras, no obtienen el resultado esperado y la palabra fracaso empieza a revolotear por su cabeza.

El caso más sonado puede ser el de Gerard Piqué y la Copa Davis. A través de Kosmos, su empresa, el exfutbolista del Barcelona pretendió cambiar radicalmente la competición más icónica del deporte de la raqueta con un formato novedoso, pero el tiempo acabó demostrándole a Piqué que lo suyo no eran los negocios y que no valía como empresario.

El catalán destruyó la esencia de la Davis y, desde entonces, no ha parado de recibir críticas. Fue tal el fracaso del excentral culé, que se vio obligado a desentenderse y le echó el muerto a la ITF (Federación Internacional de Tenis).

Además del de Piqué, ha habido otros dos casos recientes que han implicado a grandes deportistas. Por ejemplo, Sergio Ramos también ha experimentado la cara más dolorosa de los negocios. El central andaluz, actualmente sin equipo, decidió meterse con toda la ilusión del mundo en el sector inmobiliario a través de su empresa Sermos 32 S.L, con la que adquirió el 49,9 % del capital de Desarrollos Inmobiliarios Los Berrocales.

Sin embargo, el estallido de la crisis en este sector acabó afectando a Ramos y la empresa terminó quebrando después de que se tuviera que enfrentar a una amenaza de embargo de 42 millones de euros por parte del Banco Santander, que le reclamó la cantidad prestada más los intereses generados.

Con el tiempo, Ramos pudo compensar su batacazo y, en la actualidad, sigue siendo propietario de la Yeguada SR4, en la que plasmó su pasión por los caballos, y gracias a la Sergio Ramos Collection ha podido hacerse con piezas de arte de lo más cotizadas, como las de Banksy, Phil Frost o Jaume Plensa.

Y por último, en el apartado de fracasos aparece la leyenda de la NBA LeBron James. El actual jugador de los Lakers decidió en 2020 hacerse con la propiedad de SpringHill Company, una compañía de producción y de entretenimiento. El inconveniente es que LeBron no ha sabido gestionar bien el negocio empresarial y en pleno 2024 acumula pérdidas de más de 45 millones de euros, una cantidad similar al salario que percibe como jugador de los Lakers.

Casos de éxito

No todo son fracasos en esta vida y, en el otro lado de la balanza, aparecen los casos de éxito. Porque sí. Hay deportistas que han sabido gestionar correctamente sus negocios empresariales. En esa clasificación aparecen Rafa Nadal o Cristiano Ronaldo, por citar dos ejemplos.

El tenista balear es propietario del holding Debamina S.L, una matriz de la empresa Aspemir dedicada a la construcción de edificios residuales, y de Mabel Real Estate, una compañía de inversión privada que se dedica a la rehabilitación de viviendas antiguas. Con esa empresa, el manacorí adquirió un total de 11 viviendas ubicadas en la plaza Villa de París (frente al Tribunal Supremo) y en la que el metro cuadrado vale entre 15.000 y 20.000 euros. Y a través de Mabel Hospitality, Nadal es propietario de los restaurantes Tatel.

Y luego aparece el caso del astro portugués. Cristiano cuenta con un total de ocho negocios y, dentro de esa clasificación, el más exitoso es el CR7 Lifestyle Hotels, empresa hotelera con la que ha abierto varias sucursales en Lisboa, Madrid, Marrakech, Nueva York y su Funchal natal (Madeira).

De Cristiano también conviene destacar que cuenta con una participación en los restaurantes Tatel, así como una clínica especializada en el trasplante capilar (Insparya), el 10 % de la empresa de porcelana Vista Alegre, su marca de ropa interior CR7 y, más recientemente, la apertura de la llamada Ciudad del Pádel, un complejo deportivo que abrirá en 2025 y que contará con 17 pistas de pádel en 15.000 metros cuadrados ubicado en Oeiras (Portugal).