La contundente afirmación de un jugador de la NBA sobre la inclusión de deportistas trans

Enes Kanter, uno de los jugadores más polémicos de la NBA y que asegura estar apartado de la competición por opinar sobre cuestiones geopolíticas, se ha pronunciado sobre uno de los temas que más está dando que hablar en el deporte en los últimos meses. La inclusión de deportistas trans en categorías femeninas. Una práctica que está dificultando a muchas mujeres de nacimiento lograr buenos resultados.

En opinión del nacido en Turquía –nacionalizado estadounidense–, si él jugara en la WNBA (competición de baloncesto femenina de Estados Unidos) no tendría rival en la liga y podría anotar más de 60 puntos en cada partido y convertirse en la mejor de la historia, algo que tiene muy complicado de hacer en la competición masculina, pues no es ni mucho menos uno de los jugadores destacados de la liga.

«Los hombres no pertenecen a los espacios de las mujeres. Baños, vestuarios o deportes. ¿Debo ponerme una peluca, identificarme como mujer y empezar a dominar la WNBA? ¿Es entonces cuando comenzará el atropello? ¿Es eso justo para todas las mujeres que pasaron toda su vida persiguiendo sus metas? ¿Dónde están todas las activistas y feministas por los derechos de las mujeres?», ha asegurado el pívot turco en un tweet.

La cosa no ha quedado ahí y tras el ruido mediático que ha provocado este tweet ha explicado estas palabras en Fox Sports, donde ha insistido en que no es justo para las mujeres que deportistas trans puedan participar en sus competiciones: «Si me pongo una peluca y me llamo Eneshia Kanter podría jugar en la WNBA. Mido 2,08 y peso 122 kilos, si se me permite jugar promediaría 60 puntos y 30 rebotes, rompería todos los récords».

A lo largo de sus 11 temporadas en la NBA, Kanter promedió 11,2 puntos y 7,8 rebotes en 748 partidos. Unos números correctos pero muy lejos de las grandes estrellas. Es más, Kanter es más conocido por algunas polémicas sobre política, pues no se debe olvidar que tiene prohibida la entrada a su país por las duras críticas al presidente Erdogan de quien dijo «es el Hitler de nuestro siglo».