El nuevo torneo de la NBA que se fija en la Copa del Rey de España para tener mayor espectáculo

La NBA de abril a junio es un producto redondo, donde no caben modificaciones ni arreglos. Los mejores equipos del mundo batiéndose en series de play-offs que pueden llegar hasta los siete partidos regalan, cada año, imágenes memorables e históricas en esas noches primaverales. Pocas competiciones deportivas funcionan tan bien a la hora de contar historias como lo hace la liga estadounidense de baloncesto, que en esos últimos meses de temporada siempre funciona como un reloj.

Sin embargo, la historia desde octubre hasta abril, el tiempo que dura la temporada regular, es muy diferente. Son muchos partidos, 82 cada equipo, muy seguidos, sin apenas tiempo para el descanso. Las lesiones afectan mucho a los equipos y las grandes estrellas, buscando cuidarse de cara al tramo decisivo del curso, se protegen mucho ante el cansancio, llegando a descansar partidos enteros para no forzar al cuerpo. Hay poca tensión defensiva y los equipos saben, al fin y al cabo, que si ese día desconectan tienen muchos otros partidos por delante para corregirlo.

Por si fuera poco, tras 2020 se modificó el número de equipos que se clasifican a los playoffs, pasando de los 16 habituales a 20. Siendo 30 equipos los que forman la liga, dos tercios superan la temporada regular. La competitividad bajaba por momentos y el interés por la liga también. Se necesitaba un cambio.

Adam Silver, el comisionado de la NBA, se puso a buscar alternativas para recuperar el interés del público, sabiendo que la opción de reducir el número de partidos para liberar a los jugadores y aumentar el interés competitivo era contraproducente con los intereses económicos de los equipos. Y la solución estaba en la liga de baloncesto de España. Más concretamente, en la Copa del Rey. Un torneo a mitad de curso donde los resultados de la liga sirven para clasificarse o no, dando interés a partidos que, de otra manera, podrían ser otro más en un calendario interminable.

Final-Four en Las Vegas

El In-Season Tournament, como han llamado a este nuevo torneo, consiste en lo siguiente: todos los partidos de liga comprendidos en los martes y viernes del 3 al 28 de noviembre funcionarán como la fase de grupos.

Los 30 equipos de la liga se dividieron, vía sorteo, en seis grupos de cinco equipos: tres grupos de la Conferencia Oeste y tres de la Conferencia Este. Al termino de la fase de grupos, el campeón de cada grupo, más el mejor segundo de cada conferencia, pasan ronda y se clasifican a los cuartos de final, previo paso a una Final-Four que se disputará en Las Vegas y cuya final será el 9 de diciembre.

Ahora, con la fase de grupos ya terminada, se sabe quienes son las ocho franquicias que siguen en pie. Más allá de la eliminación de los Denver Nuggets, vigentes campeones de la NBA, los favoritos han cumplido y veremos a estrellas como LeBron James, Kevin Durant, Jayson Tatum o Giannis Antetokounmpo en los partidos que quedan.

Por la Conferencia Oeste, Los Angeles Lakers recibirán al megaproyecto de los Phoenix Suns y los Sacramento Kings se enfrentarán con New Orleans Pelicans en un duelo de franquicias jóvenes con mucho futuro. En el Este, Boston Celtics visitará a los Indiana Pacers y Milwaukee Bucks recibirá a los New York Knicks.

Todos los partidos, a excepción de la final, cuentan para la temporada regular. A falta de este tramo final del torneo, la fase de grupos se ha destapado como un verdadero éxito. Se ha aumentado la competitividad y el interés por partidos que antes eran uno más. Además, al ser importante el diferencial de puntos a la hora de clasificarse o no, los equipos no desconectaban en cuanto se veían lejos en el marcador, como pasaba con frecuencia antes, sino que intentaban reducir esa diferencia al mínimo.

La primera prueba con el torneo, a falta de la traca final, no ha podido ser más satisfactoria, y parece haberse encontrado la respuesta para salvar a la temporada regular de la peligrosa espiral en la que se encontraba.