El Barcelona ficha a Ricky Rubio, que vuelve a España 12 años después

Un mes después de quedarse sin equipo en la NBA, con la noticia de que no volvería a jugar en la liga estadounidense tras su rescisión con los Cleveland Cavaliers, el Barcelona ha anunciado el fichaje de Ricky Rubio.

El equipo catalán inscribirá al jugador en la Euroliga -el plazo para hacerlo cierra el miércoles 7 de febrero- y respetará los plazos del base, que lleva sin jugar al baloncesto desde el pasado verano, cuando decidió paralizar su actividad para centrarse en su salud mental. Si todo va bien, el plan es que Ricky coja ritmo físico y pueda volver con la selección española para la disputa del Preolímpico, del 2 al 7 de julio, y, si se clasifican, los Juegos Olímpicos de París.

De esta manera, Rubio vuelve al Barça, donde estuvo entre 2009 y 2011 antes de embarcarse en su aventura norteamericana que le llevó por cuatro equipos -Minnesota, Utah, Phoenix y Cleveland- en un período de 12 años.

A sus 33 años, Ricky vuelve al Barça para ponerse a los mandos del que fue, hace 12 años, su compañero en las filas azulgranas: Roger Grimau. El entrenador se ha mostrado entusiasta con esta nueva incorporación de su equipo, y es que si su equipo estaba echando en falta mayor liderazgo y capacidad para generar tiros y darle ritmo al juego, se han hecho ahora con el que, seguramente, sea el mejor base español de la historia, MVP del Mundial 2019 y máximo anotador en los Juegos Olímpicos de Tokio.

Será el propio jugador quien decida cuando será el momento de volver. El club no le quiere meter prisa y, contractualmente, ninguna de las partes está obligada a seguir con la situación si no se sienten cómodos.