Gündogan e Iñigo Martínez: ¿cómo es posible que el Barça fiche con sus problemas económicos?

El Barcelona, a 23 de junio, no ha fichado a ningún jugador de forma oficial. A diferencia del Real Madrid, que sí ha incorporado ya a cuatro futbolistas, en el Barça van más despacio. Pero algunos están ya apalabrados.

Futbolistas como el alemán Gündogan o el internacional español Iñigo Martínez están ya cerrados. Se incorporarán al campeón de Liga en próximas fechas. También lo hará Vitor Roque, talento brasileño al que están prácticamente de cerrar. Y muy posiblemente Carrasco, actual jugador del Atlético.

Y seguramente llegará alguno más ante la insistencia de Xavi Hernández, que urge a Laporta a mejorar la plantilla toda vez que en Europa no tiene forma de pasar de primera ronda de la Champions. Y la pregunta que se hace cualquier aficionado es común: ¿por qué pueden fichar si el club catalán está en una delicada situación económica?

La primera respuesta sería la misma que el año pasado: las famosas palancas. El Barça el verano pasado acometió esta venta de patrimonio que también incluía, entre otras cosas, refinanciar deuda y tener cash, dinero inmediato. Ese dinero se gastó en su mayoría el año pasado, pero aún queda una parte sumada a los ingresos de esta temporada, mayores que los últimos años.

El ok al plan de viabilidad

Pero para este verano hay más explicaciones que esa. Primero está el plan de viabilidad que acaba de aprobar LaLiga, que ha abierto una nueva etapa de relación con el Barça. Tebas dio el ok a este proyecto básico para la viabilidad económica del club y Laporta a cambio ha retirado la demanda que tenía contra LaLiga por CVC, el gran proyecto que enfrentaba a unos y otros.

Ese plan de viabilidad es básico para entender al actual Barcelona. Es lo que hace no ya solo que se pueda fichar sino que se pueda inscribir a jugadores. Cabe recordar que cualquier equipo puede fichar a futbolistas pero no después inscribirlos debido a los limites de fair play financiero y las reglas que establece LaLiga.

Por ejemplo, el Barça acaba de inscribir a Gavi para el próximo año. La temporada pasada tuvo ficha del filial. Y hace un año a Laporta le costó muchísimo inscribir a todos sus fichajes, incluido Lewandowski, y necesitó de una palanca extra pagada por Jaume Roures para poder hacerlo.

Este plan es el que recoge que se puedan hacer «operaciones no recurrentes» que vienen a ser las que generan ingresos que afectan al límite de coste de la plantilla deportiva. Son operaciones «excepcionales, no habituales» y en ellas entran la «venta de bienes o derechos que contablemente deberían calificarse como Activo No Corriente». Es decir, las palancas.

El Barça en ese plan exponía a LaLiga que tenía ya ahorros para inscribir jugadores y unos ingresos actuales y futuros para poder acometer fichajes y no saltarse la regla del 40 por ciento, que es la que indica que solo se podrá invertir un 40% de lo que se ingrese (por ejemplo, cuatro millones a gastar cuando se ingresen 10).

En definitiva, ese plan era una serie de medidas con las que el Barça se comprometía a tener unas cuentas económicas mejores y disponibles para poder fichar e inscribir. Son números financieros ante los que LaLiga dio el sí. Por eso el Barcelona tiene ahora más fácil acometer estas operaciones.

Fichajes a coste cero

Y hay también una cosa clave en estos fichajes. La mayoría son a coste cero. Es decir, gratis. Gündogan –actual campeón de Europa con el Manchester City– acaba contrato. Iñigo Martínez igual con el Athletic. Son dos futbolistas por los que el Barça no tendrá que pagar ni un euro, aunque evidentemente sí tendrá que desembolsar el sueldo.

Diferentes son los casos del brasileño Vitor Roque, una promesa de 18 años por las que el Barça sí tendrá que pagar, aunque espera incorporarlo en enero. O el de Carrasco, del Atlético, por el que el club azulgrana una opción de 19 millones (11 menos que su cláusula) dentro del acuerdo que hicieron por el fichaje previo de Depay la pasada temporada.

También el Barça necesitará tener un sustituto a Busquets y el más deseado es Zubimendi, jugador de la Real Sociedad e internacional ya con España. Por él sí que tendrá que hacer un buen desembolso Laporta. Ahí ya es donde puede tener más complicaciones.