Un equipo al que el CSD no favoreció en una situación similar a la del Barça estalla por el caso Olmo
El Málaga, por medio de su entrenador, Sergio Pellicer, considera que esta decisión es «un antes y un después»
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El caso Dani Olmo ha sentado un precedente muy peligroso en el fútbol español. La decisión del Consejo Superior de Deportes (CSD) de conceder la cautelarísima al FC Barcelona para que puedan reinscribir a Dani Olmo y Pau Víctor mientras se estudia un caso en el que parecía estar todo claro, ha sentado como un tiro a numerosos clubes españoles. Uno de ellos es el Málaga, al que nadie 'perdonó' cuando estaba en la ruina.
En el año 2019, ya con Pedro Sánchez en el Gobierno, el conjunto andaluz no pudo inscribir al japonés Okazaki en LaLiga por no cumplir con las normas del fair play financiero, lo mismo que le ocurrió al Barcelona. Por ello, el Málaga –y muchos otros actores del fútbol– ven en este caso un agravio comparativo, pues en ese caso el delantero no pudo ser inscrito y se terminó marchando al Huesca.
Es más, el Málaga por sobrepasar su límite salarial, como le pasa el Barça, fue sancionado durante una temporada con un castigo de un límite salarial mínimo de 2,2 millones de euros y la capacidad de tener solo 18 fichas profesionales. Sergio Pellicer, entrenador del conjunto andaluz, tuvo que aceptarlo y por ello ahora, viendo lo que ha ocurrido con el Barcelona, ha alzado la voz.
«Hay un antes y un después. El antes es que este club vivió dos años con 18 fichas profesionales. No cumplimos las normas y fuimos castigados. De esas dos temporadas, yo estuve durante año y medio. Hubo un ERE deportivo y otro ERE en los empleados del club. Porque lo deportivo también afecta a lo institucional. Tuvimos que ajustarnos y pasarlo mal. Ese era el antes, nos equivocamos y cumplimos», comentó en rueda de prensa el técnico del Málaga.
La vista gorda con el Barcelona
La cosa no se quedó ahí y Pellicer mandó un recado al CSD, presidido por José Manuel Rodríguez Uribes. «El después se va a marcar ahora. Las normas no van a ser igual para todos. Esto marca un antes y un después. Yo puedo hablar del antes porque viví una temporada y media. Ahora está la cautelar y se abre otra vía para todos», explicó antes de recordar que ellos sí pagaron las consecuencias de hacer mal las cosas.
«Nosotros cumplimos y fueron los momentos de mayor crisis deportiva e institucional de la historia del Málaga. Mucha gente perdió su puesto de trabajo. Yo he vivido el día a día del antes. El después creo que en los próximos 15 días puede haber un destino distinto para muchos a partir de ahora», concluyó.