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Griezmann y Simeone aceptan la petición de la directiva como medida de presión al Barcelona

Griezmann y Simeone aceptan la petición de la directiva como medida de presión al BarcelonaEFE

Simeone se encomienda a su 'protegido' Griezmann para seguir vivo en la Champions

Desde que el francés firmase su contrato con el Atlético hasta 2026 ha mostrado un nivel cercano al de antes de irse

Posiblemente Antoine Griezmann sea el jugador que más ha enamorado a Simeone en los once años que lleva al frente del banquillo rojiblanco. Si hay un futbolista al que el técnico argentino ha conseguido meterle en la cabeza su idea de juego ese es sin duda 'El Principito'. Corre, defiende, es inteligente en el terreno de juego y sobre todo no negocia un solo esfuerzo sobre el verde.

Griezmann fue junto con Diego Costa los dos jugadores que más echó en falta Simeone cuando decidieron marcharse. No obstante, con ambos consiguió su vuelta, aunque con Costa nunca pudo lograr que volviese al nivel mostrado antes de irse al Chelsea, algo que por lo visto la pasada campaña parecía que iba a volver a sucederle con el francés. Sin embargo, el Cholo nunca perdió la fe en él y ha conseguido recuperarlo para la causa. De hecho, Simeone fue quien más confío en que el galo volvería a ser un jugador de talla mundial.

Ahora Griezmann está recuperando el nivel que mostró antes de irse al Barcelona. Ese con el que lideró a la Francia campeona del mundo y con el que estuvo cerca de lograr que el Atlético consiguiese su primera Copa de Europa. Un jugador diferencial que incluso se atrevió a decir: «Ya como en la misma mesa de Messi y Cristiano», algo que posiblemente no fuese cierto, pero solo por el hecho de generar el debate ya se demuestra el tipo de jugador que fue el francés antes de abandonar el Atlético.

Un futbolista que muchos en el Metropolitano creían que nunca más se volvería a ver. La pasada campaña, 'El Principito' estuvo apático, sin apenas marcar goles y pasando completamente desapercibido en la mayoría de partidos que disputaba. Una situación que realmente vivió la mayoría de la plantilla, pues fue una temporada para olvidar en el Atlético, ya que solamente Reinildo estuvo al nivel de lo que se esperaba en el conjunto colchonero.

Esos pensamientos que tenía la afición sobre Griezmann se acrecentaron al comienzo de la temporada, pues en un principio el francés partía como titular, pero el buen hacer de João Félix y Morata en la pretemporada le relegaron al banquillo e hizo que se desde la zona noble del Metropolitano se decidiese que solo podría jugar 30 minutos por partido, lo justo para no hacer efectiva la clausula de compra obligatoria por 40 millones que tenían los colchoneros si Griezmann jugaba más del 50 % de los minutos en los que estuviese disponible. Es más, durante algunos momentos del mercado de fichajes se dejó caer que escucharían ofertas por él.

Nacido para jugar con Simeone

No obstante, Simeone no quería ni oír hablar de una venta y en cuanto había rumores él estaba ahí para desmentirlos. Por todos es sabido que entre Griezmann y Simeone hay mucho más que una relación profesional, y es que ambos son grandes amigos. Para Simeone, el internacional francés es una de las grandes leyendas del Atlético de Madrid y se encarga de recordarlo cada vez que le preguntan por él: «Griezmann es uno de los jugadores más importantes de la historia del Atlético de Madrid», comentó el entrenador rojiblanco tras el gol decisivo de Griezmann ante el Oporto.

Precisamente esa faceta del campeón del mundo es la que necesita el Cholo en el próximo partido de Champions de los rojiblancos. Al Atleti solo le vale la victoria y se agarra a Griezmann para reencontrarse con el triunfo en un Metropolitano que ha dejado de ser decisivo, pues últimamente los resultados del equipo son mejor lejos de Madrid y en Champions solo han conseguido una victoria en las dos últimas temporadas.

Es evidente que Griezmann nació para jugar con Simeone y tras su nuevo fichaje por el Atleti se ha vuelto a convertir en la estrella del equipo. En el partido de este miércoles los focos apuntarán a él y la afición, que en su mayoría ya le ha perdonado, confía en su jugador emblema para no quedar eliminado de la Champions a las primeras de cambio. La Copa de Europa sigue siendo la obsesión rojiblanca y como no podía ser de otra manera también es la de Griezmann.

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