Atlético de Madrid 1-1 Rayo Vallecano
El Rayo Vallecano castiga la especulación y el 'unocerismo' de Simeone
Un penalti en el tiempo de descuento, anotado por Falcao, quita dos puntos a un Atlético de Madrid que jugó siempre para ganar 1-0
Jugar al 1-0 siempre tiene peligro. Simeone ha sido castigado este martes. Y lo ha hecho por un exjugador suyo, Radamel Falcao, pero sobre todo por un equipo, el Rayo Vallecano, que demostró que en todo un Metropolitano el pequeño sí puede hacer daño al grande. Con un penalti en el tiempo de descuento el equipo de Vallecas ajustició al Atlético, pero sobre todo a Simeone. La especulación se castiga. El 'unocerismo' ya no tiene tanto crédito. Hacer cambios para defenderte en tu estadio ante un equipo muy menor que tú no se puede premiar. El fútbol, en ese sentido, ha sido justo. Si juegas al 1-0 te puedes quemar y el Atlético se quemó con justicia.
Se las prometían felices los rojiblancos con la conexión Griezmann-Morata. Ellos dos mantuvieron en pie, hasta donde pudieron, el proyecto de Simeone: ganar 1-0 y atrás todos. Han pasado ya ocho años del 2014 cuando eso valía. El fútbol cambia y los rivales evolucionan. Si en Bilbao fue el español quien asistió al francés, ahora fue el galo el que regaló el gol a Álvaro con una asistencia desde la banda que pasó por todo el área. Morata, bien situado en la zona de peligro, remató de primeras mientras los defensores del Rayo veían pasar el balón como el que ve pasar el vagón cuando se va a parar en tu estación.
El partido tuvo una hora soporífera, de esos partidos imposibles de recordar ya mañana. Simeone vivía feliz en el 1-0 porque si un mandamiento es claro en el 'cholismo' es el del 'unocerismo'. Y ese ganar siempre por la mínima se puede hacer desde diferentes formas. Igual puede ser un 1-0 con buenas sensaciones y ocasiones que el 1-0 que le mantenía este martes: sin alardes, parsimonioso y suplicando que el Rayo no se entonara. A veces en el fútbol así sales vivo, pero a menudo te castigan por ello.
Los de Vallecas tiraron 65 minutos posiblemente porque no les daba para más... hasta que salió Sergio Camello, canterano rojiblanco en las filas del Rayo. Su primera actuación fue bailar a Giménez y crear la ocasión más peligrosa del partido con un disparo que pasó lamiendo el palo. Fue salir Camello –y empezar Simeone a hacer cambios defensivos, además de quitar a Witsel– y el Rayo se creyó que empatar era posible. Falcao, otro ex bien conocido en filas rojiblancas, tuvo el empate en un mano a mano que sacó Grbic (sustituto de Oblak). Al colombiano, en el 85', le faltaron dos centímetros más para llegar a un remate. En cinco minutos tuvo más peligro que en los 65 anteriores y hasta el final mantuvo las opciones de quitar dos puntos al Atleti. Al Metropolitano, a la vez, le volvió la pesadilla de los canteranos, esa que ya sufrió hace pocas fechas ante el Girona con Rodrigo Riquelme. Hubo más silencio que de costumbre y ni los aspavientos populistas de Simeone levantaba a la grada en general.
El Atlético renunció al balón, no fue ni capaz de sumar una jugada de más de 20 segundos y Simeone también decidió que era otro día para dejar a Joao Félix en el banquillo. Qué forma de enterrar definitivamente a un jugador, renunciando a una posible recuperación.
Jugó tanto con fuego este Atlético que en el 90' el Rayo Vallecano se encontró con un penalti tan claro como inocente. El Metropolitano enmudeció. Un centro al área acabó en la mano de Giménez, que saltó con el brazo extendido sin sentido alguno. El árbitro no lo vio de primeras, pero desde el VAR lo tuvieron claro. Y así lo era. El penalti era de justicia y Falcao castigó al que un día fue su equipo y, especialmente, al que un día fue su entrenador. Porque estos dos puntos que el Atlético ha cedido ante el Rayo es simplemente por culpa de Diego Pablo Simeone.
Ficha Técnica
Rayo Vallecano 1: Dimitrievski; Balliu, Mumin, Catena, F. García; Óscar Valentín (Sergio Camello, 61'), Pathé Ciss (Nteka, 87'); Isi Palazón (Unai López, 87'), Pozo (Comesaña, 46'), Álvaro García (Pablo Muñoz, 80'); y Falcao.
Goles: 1-0 (Álvaro Morata, 20'). 1-1 (Falcao, 92').