La queja de Xavi Hernández y por qué Europa tapa la liga del Barcelona

Todo parece indicar que el Barcelona se llevará el título de Liga esta temporada. 72 puntos, nueve goles recibidos (cuatro de ellos del Real Madrid) y una distancia de 13 puntos sobre el club blanco a falta de diez jornadas hacen de la competición culé una digna de enmarcar. Pero, ¿por qué no se 'valora' tanto?

Eso es de lo que se queja Xavi Hernández. «La gente lo quiere ver de otra forma, pero hay que darle valor porque es muy difícil», dijo tras el último partido de la temporada. El técnico culé reflexionaba sobre el poco valor o importancia que se está dando al título que antes o después conseguirán. ¿Por qué ocurre esto?

Hay que ir a las palancas, la palabra que más sonó en Can Barça durante todo el mercado de fichajes veraniego. Sin ellas no se podía fichar y, en consecuencia, no se podía pelear por todo. Lewandowski, Raphinha, Koundé, Pablo Torré, Christensen, Marcos Alonso y Kessie fueron fichajes gracias a ese método de venta de parte de patrimonio del club y solución a las exigencias de Xavi. 158 millones en fichajes más otros tantos en las renovaciones de Ansu Fati, Araujo, Dembélé y Gavi (que está por ver). Un proyecto ilusionante.

Un proyecto con el cuál Joan Laporta pretendía devolver al club a lo más alto del panorama europeo... como poco. Un equipo para luchar por todo que ilusionaba a cualquier culé. «Hemos vuelto», se decían a sí mismos. ¿A dónde? La respuesta es solo a la Liga, porque en el resto se quedaron muy lejos. Sobre todo en Europa, que es lo que de verdad juzga a un proyecto.

La gran mancha de Europa

No fue capaz de ganar ni a Bayern de Múnich ni a Inter de Milán, que son quienes juzgan todo proyecto. El Barça cayó en grupos relegado de nuevo a la Europa League, donde se fue también a las primeras de cambio superados por el Manchester United.

Eliminados a las primeras de cambio, este ha sido otro año de poco éxito europeo para el club blaugrana. El paso del Barça por Europa mancha la temporada en su totalidad. Se pretendía ganar y competir. No estuvo ni cerca.

Sin Europa que remedio que recurrir a las competiciones nacionales. Ganó la 'nueva' Supercopa al Real Madrid con mucha autoridad (1-3). Con la Liga en el bolsillo desde febrero sólo quedaba la Copa del Rey y en semifinales el Real Madrid les remontó en su estadio y se consumó el estrépito. En liga sí: fue un Barça contundente, ganó cuando tenía que ganar y venció cuando quizás no merecía.

Ya pasó en 2016 y 2018. El Barcelona ganó la Liga. Nadie se acuerda de que lo hizo. En el fútbol se recuerdan más las derrotas que las victorias y en el caso del club azulgrana se recuerdan más las dolorosas remontadas en Champions frente a Liverpool y Roma que los éxitos logrados durante esas temporadas.

Nadie recuerda por cuánta diferencia ganó el Real Madrid la pasada liga (13 puntos). Se acuerdan de que la ganó y que además la acompaño de una excepcional campaña en Europa (ganó la Champions). Nadie quita valor a la campaña del Barça, todo el mundo sabrá que el club culé se alzo con el título liguero, pero no cómo lo hizo, si fue mucha o poca distancia o si recibió muchos goles o no. Europa tapa la liga del Barça.