Hansi Flick, el técnico del 2-8 que tiene por delante la misión de devolver al Barça a lo más alto

Una vez confirmado el adiós de Xavi Hernández, se abre una una nueva etapa en el banquillo del Barcelona. Hansi Flick toma el relevo del egarense al frente del conjunto azulgrana. Para muchos podrá ser un periodo de lo más ilusionante, pero la realidad es que no se sabe del todo qué tal le va a ir al alemán en la Ciudad Condal.

La de Flick es una apuesta de la dirección deportiva encabezada por Deco. Y sus antecedentes a nivel de clubes son cuanto menos esperanzadores. Recordemos que Flick fue el técnico que ganó ese sextete espectacular con el Bayern de Múnich y también fue el que le endosó la mayor goleada de la historia en Champions al club catalán. En Barcelona son incapaces de olvidar ese famoso 2-8 que le metió el conjunto bávaro al culé. Un estadio Da Luz de Lisboa sin gente presenció esa exhibición futbolística y táctica.

Si Flick es capaz de repetir lo que consiguió en Múnich, el barcelonismo estará más que satisfecho. Pero siendo realistas, este Barça no se parece nada a ese Bayern. Para conseguir algo parecido, Flick tendrá que ajustarse a la situación que vive el club culé, que no es precisamente la mejor.

Si son capaces de dejar trabajar a Flick, el éxito está más que asegurado. El problema que existe es que el barcelonismo carece de paciencia y en cuanto las cosas vengan mal dadas, señalarán al alemán y empezarán a pedir su cabeza. La presión que hay en Barcelona no es ni similar a la que hay en Múnich. Para entrenar al conjunto barcelonista, hay que ser valiente y Flick lo parece.

¿Cómo juegan los equipos de Flick?

La llegada de Flick al banquillo del Barça supone, en primer lugar, un cambio de sistema. Para él, el clásico 4-3-3 no existe y le gusta mucho utilizar el 4-2-3-1, lo que le permite ganar velocidad por banda y ser mucho más incisivo en ataque.

En ese sentido, futbolistas como Lamine Yamal y, no se sabe, si Raphinha tendrán mucho protagonismo con el alemán. Son dos extremos diferenciales y tendrán que moverse hacia el centro para liberar las bandas, lo que permite la incursión de los laterales hacia arriba. Esa es otra decisión que debe de tomar el teutón. En el lateral izquierdo tiene a Alejandro Balde y en el derecho, de momento está Joao Cancelo, pero la continuidad del portugués no está garantizada por su bajo rendimiento en los partidos claves.

Otro pilar fundamental en la filosofía de juego de Flick es la presión y la contrapresión. Cuando su equipo no tiene el balón, los futbolistas ejercen una presión alta constante y se reorganizan rápido, lo que les permite llevar a cabo un bloque corto, lo que les ayuda a reducir las distancias a recorrer y así poder recuperar la posesión lo antes posible.

En definitiva, la llegada de Hansi Flick al Barcelona supone una revolución táctica y su propuesta de juego combina posesión, velocidad y agresividad defensiva. Y el principal objetivo no es otro que devolver al conjunto culé a lo más alto. Lo que sí está claro es que el alemán tiene mucho trabajo por delante.

¿Qué tipo de futbolistas podría fichar?

Luego está el apartado de fichajes. Al Barça de Xavi le faltaron algunas piezas importantes que le impidieron competir en los partidos decisivos. La situación económica del Barça es la que es y para poder fichar, lo primero es dejar salir.

El ojo derecho de Flick es Joshua Kimmich. El alemán ocupa la posición de pivote y para el Barcelona sería un sueño y una ilusión poder tenerle en su equipo. Dicha demarcación es fundamental para el estilo de juego que pretende implantar Flick en el Barça y Oriol Romeu no es una opción.

Otro futbolista que podría ser del gusto de Flick es Bernardo Silva. El portugués lleva coqueteando varios veranos con el conjunto azulgrana y este año podría acabar llegando si decide marcharse del Manchester City, como ya sucedió con Gündogan la temporada pasada, otro jugador muy del gusto de Flick.

Y por último habrá que ver qué sucede con Raphinha. El extremo brasileño podría marcharse del Barça si acaba llegando una buena oferta. Si el '11' se acaba yendo, el club culé necesitará buscar un reemplazo. En el Bayern, Flick tuvo al francés Kingsley Coman. Lo que está claro es que se viene un verano movido en Can Barça. Y Flick tendrá, junto con Deco, toda la responsabilidad en los fichajes.