Brasil subió otro ocho mil
Jugará a lo sumo dos partidos en serio, toma Mundial. A ojo, solo una noche redonda de Francia o una noche negra propia le alejaría del título
Es durísimo. Brasil coronó otro ocho mil rumbo a su sexto título. Sin sherpa ni oxígeno. Tras las feroces batallas con Serbia, Suiza y Camerún fue el turno de Corea del Sur. Ni en los tiempos de Joao Havelange, aquel ejemplar presidente de la FIFA, se vio cosa igual.
El sufrimiento que viene será con Croacia como pudo serlo con Japón, que solo cedió en los penaltis. Con un portero y siete futbolistas de campo estarían también en cuartos. Y en semifinales cuando les toque.
¿Son los mejores? Lo son. Menos que cualquiera de los ‘brasiles’ que se alzaron con el título, también el del 82, el campeón sin corona. Pero es Brasil y hay lo que hay, diría Koeman. Jugará a lo sumo dos partidos en serio, toma Mundial. A ojo, solo una noche redonda de Francia o una noche negra propia le alejaría del título.
Y Argentina si llega, claro. Porque un Brasil-Argentina no es un partido de fútbol sino otra cosa. Valga como referencia la final de la Copa América que ganaron Messi y cía, nada menos que en Maracaná, tras 28 años y siete finales perdidas. El primer título de selección de Leo.
Y en horas, España. A las cuatro, los apretones cuanto antes mejor. Convendría ganar y meternos en la pomada, el pueblo lo agradecería. Me gusta haber ido a menos. Que vamos a ser campeones no lo dice ya nadie más que el streamer y sus muchachos. Bien. Nos hemos convertido en 'El tapado'. Que suena a bar de barrio. Marruecos no me gusta un pelo. Quizá el ideal era Croacia. Lo jorobó Japón. Y nosotros, claro. A ver…