El 'timo' del US Open con la venta de pelotas usadas en partidos que indigna a los aficionados
La organización del torneo ha puesto a la venta por 12$ las bolas usadas durante el evento pero en el bote no especifica el partido en el que se utilizaron
Emma Navarro, la hija de un banquero millonario presente en Forbes que amenaza a Paula Badosa en el US Open
El US Open está resultando un tanto decepcionante a nivel de tenis, pero en cuanto a marketing, como acostumbran, están explotando al máximo su producto. Su última decisión ha sido la de poner a la venta las pelotas usadas y que ya no sirven para nada. En total, en cada edición del torneo se utilizan alrededor de 70.000 pelotas y normalmente se reciclan, pero el Grand Slam neoyorquino ha optado por vender a 12$ cada una de ellas.
Esta decisión ha generado un gran revuelo en los aficionados. Resulta que las pelotas se venden en packs individuales y ni siquiera se sabe en que partido se han utilizado. De hecho, es hasta posible que únicamente se hayan empleado en entrenamientos, lo que hace aún menos valioso el hacerse con una bola usada, puesto que además el precio es similar al de un bote de pelotas nuevas.
«El tenis nunca deja de hacer dinero», «Totalmente innecesario» o «Nueva está por 2$» son algunas de las quejas que han hecho los aficionados por esta decisión del torneo. Y es que antes, en muchos entrenamientos se tiraban a los aficionados algunas pelotas e incluso después el jugador en cuestión se acercaba a los aficionados para firmarlas. Ahora las bolas van sin firma y algunas en muy mal estado.
Hay que destacar también que en el US Open cuando una pelota se salía de la pista y le caía a un aficionado, este tenía la posibilidad de quedársela, algo que ocurre en muy pocos torneos. Normalmente hay que devolverla para que haya siempre seis pelotas en pista y con los mismos juegos de uso. Una norma que parece que también va a llegar al último major del años.
El 'timo' para los aficionados
Lo último de lo que se quejan los aficionados es que no hay nada que garantice que la pelota se ha usado en un partido. Ya no es solo que no se sepa el encuentro, es que lo único que asegura que son pelotas de partido es la tapa del bote con un mensaje de «certificado de autenticidad». Además, creen que lo suyo sería saber el choque y que estuviese firmado por los tenistas que participaron.