Las horas trabajadas por ocupado caen un 7 % respecto a 2008, y casi un 4 % con 2018

Acaba de publicar el Instituto nacional de Estadística de la Sra. Manzanera, la Encuesta de Población Activa del 4º Trimestre de 2023.

Esta que le ha permitido pegarse un pingüi a la inculta de la ministra de Trabajo, que es capaz de confundir a Juana la Loca, la Reina de Castilla casada con Felipe el Hermoso, que dicen enloqueció por amor, con Juana de Arco, muerta en la hoguera por los ingleses y que después fue eleva a la categoría de Santa.

Como digo, la inculta Barbie a la que le gusta abrazar y besar a cualquiera que se le acerca, dice de la economía que te abraza para hacerte más feliz, no soy psicólogo, pero esta señora además de Tenacillas para su pelo, necesita cariño de alguien.

Pero lo peor de todo es que no entiende lo que lleva entre manos. Tiene uno de los ministerios más importantes que existen, el de Trabajo, en el que hay que trabajar mucho, valga la redundancia, para sacar adelante propuestas reales para crear más puestos de trabajo, que tengan una continuidad y no desaparezcan como un azucarillo en agua caliente.

Pero para ello, hay que pensar en qué sectores queremos crear trabajo estable, después de escoger los sectores, hay que implantar medidas concretas que favorezcan la contratación y, por lo tanto, la creación de nuevos puestos de trabajo.

Para ello, además, hay que buscar inversores nacionales o extranjeros que quieran invertir en ese sector y, si es necesario, que para eso se es ministro, plantear beneficios económicos en los primeros meses, trimestres o incluso años por la generación de nuevos puestos de trabajo netos creados.

Se tiene uno que reunir de los mejores expertos en microeconomía, en psicología del trabajo, con sociólogos expertos en búsqueda de oportunidades y formar un equipo multidisciplinar que, en pocos meses, presente propuestas concretas de desarrollo integral de actividades.

Y así, a los 2/3 años se empiezan a recoger los frutos del trabajo realizado y se ha dinamizado la economía de una región o de un sector económico, se han creado empresas que, a su vez, han creado empleo, se está recaudando más en IRPF, en cotizaciones sociales, en impuestos de sociedades, en Actividades Económicas, en IBI, pero lo más importante se está haciendo crecer la economía real de un país.

Pero de todo lo que he escrito, que es en lo que debería pensar, ni se le ha ocurrido nada para hacer y ejecutar y no se le ha ocurrido porque nunca ha estado al pie del cañón en nada. Ha comido de la política, ha vivido de ella, ha desarrollado una forma de trabajar que en el toreo se llama de salón. No sabe de lo que habla porque nunca ha estado en realidad trabajando para una empresa.

Siempre ha estado en despachos con secretarias que te resuelven un montón de problemas, pero no sabe que el 90 % de los empresarios no se puede pagar una secretaria y se hacen ellos mismos, sus búsquedas de viajes, contratan sus hoteles y alquilan ellos sus coches, cosa que esta comunista ni sabe cómo funcionan ni le ha tocado nunca hacer.

Torea de salón con mucho estilo, pero la plaza de toros le queda muy grande y por ello arremete contra todo y contra todos, porque sabe que lo único por lo que puede llamar la atención es porque crea polémicas para así justificar que está haciendo cosas.

Por todo ello, cada cosa que toca la estropea, la vuelve inútil y la hace inservible. Se le ocurre que una figura que ya existía, porque crear no crea nada, como los Fijos Discontinuos le tiene que servir para cambiar las estadísticas y así retorcer los números, que ninguno sea comparable y, como además, decide que hay cosas que mejor no contar para tergiversar la realidad.

Y ahí la tenemos sacando pecho por lo que cree que entiende, cuando en realidad no sabe de lo que habla y además está todo sin sentido. No sabe leer un número, no sabe interpretarlo y ya no digo que tuviese que calcular un incremento o decremento, porque la fórmula para ella sería como para mi entender la teoría del Bosón de Higgins.

Pero la realidad absoluta es que desde que llegó al Ministerio, solo ha sabido hacer de comunista, repartir la miseria.

Mírenlo ustedes para que se queden tranquilos de que no he dicho nada que no sea verdad:

El 2008, el último gran año económico de la historia de España, que estaba a punto de darse la vuelta y que no hemos conseguido de verdad hacer algo nuevo, trabajamos una media 679.779 horas a la semana y como la media de personas ocupadas fue de 20,47 millones de personas, esto quiere decir que la media de horas trabajadas fue de 33,2 horas por ocupado.

En 2018, justo 10 años después, que es cuando llegan estos indocumentados al Gobierno, terminan ese año con una media de 619.498 horas semanales trabajadas, que suponen 60.000 horas menos a la semana, que es una bajada de 8,9 %, pero como los ocupados también son menos, 19,328 millones, que suponen un 5,6 % menos de ocupados, la productividad media solo cae un 3,5 % en los primeros 10 años, hasta quedarse en 32,1 horas por ocupado

En los cinco siguientes, que es donde aparece nuestra Barbie, las horas trabajadas suben hasta 647.631 semanales, que suponen estar todavía 32.000 horas a la semana menos que en 2008, si bien los ocupados han subido hasta 21,006 millones, esto significa que en 2023 hemos trabajado solo 30,8 horas a la semana.

O sea, hemos trabajado todavía menos que en 2008, con más gente y, por lo tanto, hemos repartido menos horas entre más y este se ha desplomado a 30,8 horas a la semana, que es la cifra más baja.

Lo dicho repartir la miseria es lo suyo, pero generar riqueza no saben lo que es.