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Análisis económicoJosé Ramón Riera

Cataluña, la comunidad que más concursos de acreedores suma en el primer semestre

O somos un caso muy atípico donde el crecimiento mata empresas, o los datos del Gobierno no cuadran

Vimos, en uno de mis artículos anteriores, que los concursos de acreedores presentados en los juzgados de lo mercantil habían crecido un 65,3 % en el primer semestre de 2024, frente al primer semestre de 2023, con datos obtenido de la web del Colegio de Registradores.

Hoy lo que vamos a ver es cómo se han distribuido dichos concursos entre las diferentes comunidades, porque esta distribución de cierres empresariales va a ser el termómetro de la situación económica de las diferentes comunidades autónomas.

El presidente de la Generalitat, Salvador IllaEuropa Press

Lo primero que quiero añadir es que aunque se les quiera llamar concursos, deberíamos de llamarlos por su nombre real, quiebras o cierres en empresas, porque no conozco ninguna pequeña ni mediana empresa que haya sobrevivido después de presentar un concurso. Si no sobreviven, es que cierran y, si cierran, es porque han quebrado, pero somos un país de edulcorar con eufemismos la realidad. Llamarle a la quiebra de una empresa concurso de acreedores es burlarse de los empresarios y de los que se juegan su dinero.

El modelo que existe para la presentación del concurso, el tiempo que se tarda en tener un administrador concursal y el convencimiento de estos de que nadie sobrevive, produce, efectivamente, que nadie sobreviva. Así toda empresa pequeña y mediana que se ve abocada a esa situación ya sabe que sus días empresariales acabaron, que lo mejor que le puede pasar es que cuando llegue el administrador nombrado por el Juzgado de lo Mercantil, es que desde que presentó el concurso tengo todo listo para producir el cierre cuanto antes y evitarse mayores dolores de cabeza.

Pero es nuestro modelo, un modelo que solo Ciudadanos pretendió cambiar y que no consiguió, porque por desgracia en este país no le importan a nadie las pequeñas y medianas empresas, que aunque generen el 80 % del empleo no tienen ningún poder y no hay nadie que tenga interés en defenderlas, que caigan y desaparezcan solo les preocupa a los familiares y amigos de los empresarios.

Pero veamos cómo se produce la destrucción de Pymes en las diferentes comunidades:

Aquí tienen la distribución de ese crecimiento del 65,3 % que equivale a haber perdido 7.068 empresas más y en total 17.897 empresas en solo 6 meses, que a su vez equivale a perder 99 empresas al día incluyendo sábados, domingos y fiestas de guardar.

Cataluña tiene el honor de encabezar la lista de las comunidades donde más empresas se han perdido y han cerrado, con un total de 4.626 empresas en total y 1.599 empresas más que en 2023. Cataluña pierde todos los días 26 empresas y en Cataluña siguen pensando que esto es lo normal.

Cataluña supone el 25,8 % del total de los concursos, lo que quiere decir que de 1 de cada 4 empresas que cierran en España, ese cierre se produce en Cataluña.

Pero le sigue la Comunidad de Madrid que en los seis primeros meses el año se han ido a concurso 2.787 empresas un 40 % menos que las empresas catalanas a pesar de que el incremento con respecto a 2023 es de 1.298 empresas y, por lo tanto, la Comunidad de Madrid tiene la obligación de ponerse a trabajar, para parar esta sangría de perder todos los días 15 empresas.

Si la Comunidad de Madrid quiere, se pueden implantar ayudas y buscar maneras de evitar esta sangría, porque lo bueno que tiene Madrid es que si es sensible a este tipo de situaciones, si las conoce, así que espero que por el bien de las pymes de esta Comunidad se hagan cosas para paliar los efectos de un gobierno socialista en el país que no quiere ni ver ni oír hablar de empresarios.

La tercera comunidad, en valores absolutos, es la Comunidad Valenciana con 2.417 concursos y la cuarta es Andalucía que con 2.164 casos ocupa un puesto más que razonable.

Lo que sí sorprende es el número de casos de cierres que se produce en la Región de Murcia que ocupa la quinta posición con 978 casos y el 5.5 % del total, que son muchos más de los que les correspondería por su actividad real en el conjunto nacional.

Las buenas noticias las dan dos pequeñas comunidades como Cantabria, que solo aporta 122 casos, y La Rioja, que además de solo sumar 63 de los cierres, además los reduce en 12 con respecto a 2023.

El incremento de un 65,3 % de los casos de concurso en un período en que va como un cohete la economía y ser el faro que ilumina a la Unión Europea, nos dice que algo muy raro está pasando en nuestra economía, o que bien el crecimiento mata empresas y seríamos un caso atípico en el mundo o bien el crecimiento es falso y está inventado por un Gobierno que solo sabe mentir.

Escojan ustedes mismos cual creen que es la verdadera razón.