La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz.
El Gobierno veta esta semana las leyes que eximen el SMI de tributación con Sumar en contra
Los votos de PP y Sumar dejarían sin efecto la tributación del SMI pretendida por el Gobierno
El Gobierno tiene hasta el próximo viernes para presentar en el Congreso su anunciado veto a las proposiciones de ley registradas por Sumar, Podemos y PP para que el salario mínimo interprofesional (SMI) quede exento de IRPF, una decisión que Sumar y PP podrían dejar sin efecto si aúnan votos.
La Mesa del Congreso, en la que hay cuatro representantes del PP, tres del PSOE y dos de Sumar, no ha sido convocada de momento, con lo que podría agendarse una vez que llegue el veto que tendrá que someterse a su consideración.
Sumar está centrada en su proposición de ley y con voluntad de negociar con el PSOE, por lo que podría no votar a favor de tramitar las otras dos proposiciones, mientras que el PP no ha querido adelantar lo que hará.
La tributación del salario mínimo enfrenta a los socios de coalición. Mientras la parte socialista del Gobierno insiste en que el salario mínimo ha alcanzado un nivel en el que tiene que empezar a tributar y no piensa dar marcha atrás, Sumar defiende que siga exento porque se trata de colectivos vulnerables y aboga por negociarlo.La vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha advertido de que, si el SMI sigue sin tributar, ya no podrá seguir subiendo como lo ha hecho hasta ahora. Acumula una subida del 60,9 % desde 2018: de 735,90 euros brutos mensuales en catorce pagas a 1.184 euros en 2025.
El nuevo SMI supone 16.576 euros brutos anuales, una cantidad que no implica necesariamente pagar IRPF. Dependerá de las circunstancias personales y familiares de las personas contribuyentes.
El Ministerio de Hacienda calcula que el 80 % de los perceptores del salario mínimo seguirá sin abonar ninguna cuota, mientras que dejarlo exento tendría un impacto cercano a los 2.000 millones.
Diferencias entre las tres proposiciones de ley
La proposición de ley de Sumar prevé la introducción de una reducción en el IRPF que garantiza que los perceptores del salario mínimo no tributen, y que vean reducida su cuota aquellos que ingresen hasta 5.000 euros por encima de este nivel.
La proposición de ley del PP, en cambio, modifica el umbral a partir del que es obligatorio presentar la declaración para situarlo en el salario mínimo aunque proceda de más de un pagador, al tiempo que insta al Gobierno a cambiar la ley para que no se apliquen retenciones a estos contribuyentes.
En ese mismo sentido, la proposición de ley de Podemos establece que no se practiquen retenciones a quienes ingresen retribuciones iguales o inferiores al salario mínimo.
Los textos de las tres proposiciones de ley aluden al salario mínimo, sin asignarle ninguna cantidad, lo que garantizaría que las exenciones propuestas, si resultan aprobadas, se mantengan sea cual sea el nivel del SMI.
