Baja laboral
¿Puedo viajar si estoy de baja laboral?
Con la llegada de la Semana Santa, son muchos los españoles que han decidido parar unos días fuera de su ciudad
Llega la Semana Santa y, con ella, unos días festivos que muchos desean aprovechar antes de la llegada de las ansiadas vacaciones de verano. Pero estás de baja y, aunque no puedes realizar tu trabajo con normalidad, te gustaría despejarte y disfrutar de unos días alejados de las paredes de tu casa. ¿Puedes viajar sin peligro a que te despidan?
La baja laboral, conocida como incapacidad temporal (IT), es el periodo de tiempo que un trabajador necesita para recuperarse de un problema de salud, ya sea físico o psicológico, durante el cual no puede acudir a su puesto de trabajo. Durante el periodo de tiempo en el que el trabajador se beneficie de esta baja, recibirá el subsidio por incapacidad y tendrá que atender a las revisiones correspondientes para seguir el progreso de su enfermedad hasta recibir el alta y poder reincorporarse a su trabajo.
Viajar estando de baja
Según establece el artículo 175 de la Ley General de la Seguridad Social, existen una serie de causas por las que se puede perder el derecho a cobrar el subsidio por incapacidad temporal. No obstante, ninguna de ellas hace referencia a viajar. ¿Significa esto que puedo hacer un viaje estando de baja sin consecuencias?
La respuesta a esta pregunta dependerá de la situación del individuo que está de baja, del trabajo que realiza y del tipo de viaje que desea emprender. Y es que la ley contempla que si se actúa de forma fraudulenta, se perderá el derecho al subsidio.
¿Y qué es actuar de forma fraudulenta? Abandonar el tratamiento, trabajar en otra cosa o realizar actividades que puedan empeorar el problema de salud. De este modo, se podría viajar siempre y cuando este desplazamiento no suponga un agravante en la situación de la enfermedad que pudiera retrasar la recuperación del paciente.
Lo recomendable para evitar problemas es solicitar una autorización al médico de cabecera para viajar. Este determinará si el viaje que se quiere realizar supone algún riesgo para el paciente o si, por el contrario, puede ser incluso recomendable, algo que suele pasar en las bajas causadas por estrés o ansiedad.