El Senado de Brasil aprueba una reforma educativa que obliga la enseñanza del español
Esta medida debe regresar a la Cámara de Diputados para discutir los cambios introducidos
El Senado de Brasil aprobó este miércoles una reforma educativa que vuelve obligatoria la enseñanza del español como lengua extranjera, junto al inglés, en los últimos tres años de escolaridad. Esta medida debe regresar a la Cámara de Diputados para discutir los cambios introducidos, ya que el texto originalmente aprobado por esta cámara en marzo consideraba el castellano apenas como idioma optativo.
Durante el debate, la ponente del proyecto en el Senado, Dorinha Seabra, declaró que la obligatoriedad del castellano fue un pedido de la comunidad educativa, que además ve en esta medida una oportunidad para promover una mayor integración de Iberoamérica «La enseñanza del español permitirá a nuestros estudiantes estar mejor preparados para interactuar con nuestros vecinos y entender mejor la cultura y el contexto regional en el que Brasil está inserto», afirmó Seabra.
La reforma educativa también abre las puertas a la enseñanza en lenguas indígenas y al aprendizaje de otros idiomas extranjeros usados en territorios vecinos, como la Guayana francesa. Este enfoque inclusivo refleja un reconocimiento de la diversidad lingüística presente en el país y en la región. Además, la nueva legislación permitirá que ciudades con fuertes lazos con otros países, como las colonias de origen alemán e italiano en el sur de Brasil, puedan sustituir el inglés y el castellano por los idiomas utilizados por sus antepasados.
Aunque no hizo referencia específica a la introducción del castellano, el ministro de Educación, Camilo Santana, señaló que la aprobación de la reforma era una «victoria» fruto del diálogo con profesores y estudiantes. «Este es un paso importante para modernizar y adaptar nuestro sistema educativo a las necesidades actuales de los estudiantes y del país», comentó Santana. El ministro también destacó que la reforma busca mejorar la calidad de la educación y preparar mejor a los jóvenes brasileños para un mundo globalizado.
Brasil, con una población lusófona de 203 millones de habitantes, está casi enteramente rodeado por países de habla hispana, salvo por la Guayana francesa. Además, cuenta con importantes comunidades migrantes de origen venezolano y boliviano, lo que hace aún más relevante la enseñanza del castellano. El conocimiento del español no solo facilitará la comunicación y las relaciones comerciales con los países vecinos, sino que también permitirá una mayor comprensión y cooperación en el ámbito regional.