La incompetencia de Pilar Alegría
Rabia en los estudiantes contra el Gobierno por la PAU: «Es inédito, estamos viviendo una época desesperante»
Pasados casi dos meses de curso y a menos de un año de que los alumnos se enfrenten a la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), todavía no se ha entregado a los centros los modelos de examen con los que los estudiantes se verán cara a cara en junio
La ministra de Educación, Formación Profesional y -Deportes, Pilar Alegría, anunció a bombo y platillo el pasado 11 de junio la implantación de una nueva Selectividad para el curso 2024/2025. La socialista presumió de que se trata de «la primera vez» que una Selectividad «incluye criterios comunes y homogéneos para todos los territorios, tanto en el formato de las pruebas como a la hora también de evaluar dichas pruebas».
Sin embargo, pasados casi dos meses de curso y a menos de un año de que los alumnos se enfrenten a la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU), todavía no se ha entregado a los centros los modelos de examen con los que los estudiantes se verán cara a cara en junio y que dictarán su futuro.
«Estamos viviendo una época desesperante porque ya no solo es que empecemos el curso sin tener idea de cómo va a ser el modelo ni el temario, sino que nadie dice nada», expresa Juan, alumno de segundo de Bachillerato del Colegio CEU Jesús María de Alicante, a El Debate.
Según informó el Ejecutivo de Pedro Sánchez, con el nuevo modelo se pretende que los conocimientos adquiridos por los alumnos se plasmen en el papel de forma transversal, de manera que los estudiantes puedan conectar las distintas informaciones almacenadas para resolver los problemas que se planteen.
«Desde siempre nos han enseñado a memorizar el contenido y vomitarlo en el examen. Ahora quieren hacer todo más competencial. No sabemos a qué se refieren. Nos causa muchísimo agobio llegar al examen y encontrarnos con algo de nuevas», apunta Juan a este medio.
A medida que avanza todo y seguimos sin tener información, el agobio se hace más patente
Aunque el profesorado intenta calmar a los alumnos, la tensión se contagia. «En mi clase somos gente que se toma las cosas con humor, porque si lo pensamos demasiado nos agobiaríamos bastante. A medida que avanza todo y seguimos sin tener información, el agobio se hace más patente», agrega este alumno.
Victoria estudia en el colegio Everest de Madrid y manifiesta en conversación con El Debate que «nos crea cierta incertidumbre porque en primero de Bachillerato hicimos modelo covid y ahora lo van a cambiar». «Estamos un poco perdidos y nerviosos», agrega.
Los profesores, con incertidumbre
«Estamos razonablemente tranquilos porque el modelo de examen va a cambiar y eso genera incertidumbre. Pero estamos tocando lo que esta bajo nuestro control para intentar prepararlos lo mejor posible. Los alumnos están a lo que tienen que estar, a aprovechar el tiempo para poder pasar con éxito la Selectividad», señala Antonio Fraile, subdirector de Everest School Monteclaro.
Juan Bautista es profesor y jefe del departamento de Humanidades del Colegio CEU Jesús María de Alicante y admite a este periódico que «la opinión de todo el claustro es que es una situación inédita. Nunca hemos empezado el curso de esta manera. Siempre nos habían reunido con tiempo para empezar el curso con todo preparado. Hay mucha incertidumbre».
Respecto a cómo están lidiando los profesores con esta situación, afirma que «nosotros estamos haciendo lo mismo que si no hubiera habido ningún cambio, con la confianza de que lo estamos haciendo bien. Aunque hubiera cambios profundos, estamos preparando a los alumnos para que lo puedan defender de forma adecuada».
«Lo que se está oyendo es que se reduce la optatividad y eso sí que preocupa. Sobre todo si no saben cómo va a ser. Tienen la tranquilidad de que no les estamos transmitiendo los nervios. Pero los alumnos lo ven por redes sociales, ven que hay familias intranquilas», agrega.