El Supremo despeja este martes la incógnita de los ERE con la sentencia firme para Chaves y Griñan

Dos meses después de la vista celebrada en el Supremo para resolver los recursos planteados, por varios de los condenados, contra la sentencia de la Audiencia Provincial de Sevilla que determinó el papel de la Junta de Andalucía en una trama de reparto ilegal de 679 millones de euros, entre 2000 y 2009 -bajo la excusa de ayudas al empleo para prejubilaciones que fueron totalmente fraudulentas y arbitrarias- el Alto Tribunal está listo para pronunciarse. Sobre la mesa, el fallo de 9 años de inhabilitación para el expresidente andaluz Manuel Chaves, como autor de un delito continuado de prevariación; y, los 6 años de prisión, más 15 de inhabilitación, para el también exlíder socialista José Antonio Griñán, por sendos delitos de malversación de fondos y prevaricación.

Si de acuerdo con la petición expresa de la Fiscalía que informó a favor de que el Alto Tribunal confirme las penas impuestas a todos y cada uno de los 19 exaltos cargos socialistas recurrentes, el Supremo ratifica las sanciones, también entrarían en prisión también los exconsejeros Carmen Martínez Aguayo, Francisco Vallejo, José Antonio Viera y Antonio Fernández. No así la exministra de Fomento del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero, Magdalena Álvarez, ni tampoco el exregidor autonómico Gaspar Zarrías, ya que sobre ellos sobrevuelan 9 años de inhabilitación.

Así las cosas, los magistrados Ana María Ferrer, Juan Ramón Berdugo (presidente), Eduardo de Porres (ponente), Carmen Lamela y Susana Polo han deliberado para adoptar una decisión marcada por la «complejidad» en la que el anuncio de algún voto particular, provocó el retraso de los plazos iniciales estimados para notificarla.

No en vano, en su último auto el Supremo se concedió 60 días hábiles más -a contar desde el pasado día 23 de mayo- de los inicialmente previstos, para deliberar sobre el caso. Finalmente no han necesitado agotar la prórroga y la sentencia firme de la pieza política de los ERE se conocerá, en su totalidad, este martes, tal y como ha podido saber El Debate en avance.

El Alto Tribunal cumplirá así con su compromiso de no dar a conocer el falle definitivo hasta después de las elecciones autonómicas del pasado 19 de junio en Andalucía para, en cumplimiento de un tradición no escrita, evitar cualquier influencia en el resultado de los comicios y alejar las decisiones judiciales de la lucha partidista.

La intervención del expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero durante un mitin en Vélez-Málaga junto a Juan Espadas, exalcalde de Sevilla y candidato del PSOE en la campaña andaluza, se traducía por sorpresa en una enardecida defensa de los expresidentes socialistas de la Junta Manuel Chaves y José Antonio Griñán. Zapatero manifestaba, entoncesm su «orgullo» por todos los dirigentes socialistas de la Junta, citando expresamente a ambos condenados por el caso ERE y asegurando que «son personas honestas».

Tras el pésimo resultado electoral cosechado en dicha convocatoria por el PSOE-A lastrado, en parte, por la alargada sombra de la corrupción que también salpica, presuntamente, a la mujer del propio Espadas, el Supremo se prepara para notificar la sentencia que pondrá fin a la trama principal de la macrocausa.

Un modus operandi que, lejos de disiparse con la sentencia del Supremo que se conocerá en su totalidad este martes, sigue salpicando a los ex cargos que han pasado por la Junta, durante los más de cuarenta años de hegemonía socialista. El juez instructor del caso, Ignacio Vilaplana, mantiene más de un centenar de piezas separadas de la trama central de las que tan sólo la mitad de ellas han madurado lo suficiente como para avanzar de fase.