41.º Congreso Federal
Militantes del PSOE-A se inventan el concepto de «desequilibrio vertical» para hablar de financiación
Quieren evitar que en el Congreso Federal se hable de «singularidades» tras el pacto del cupo catalán
Militantes del PSOE andaluz han aprobado enmiendas a la ponencia marco del próximo Congreso Federal –que se celebrará en Sevilla entre el 29 de noviembre y el 1 de diciembre– en las que se inventan el concepto «desequilibrio vertical» para no hablar de «singularidades» en relación con el sistema de financiación autonómica.
Desde las ocho provincias andaluzas se han elevado casi 1.800 aportaciones a la ponencia marco del Congreso Federal del PSOE, según avanzó por redes sociales la semana pasada el secretario general del PSOE andaluz, Juan Espadas, que presidirá el cónclave en su condición de anfitrión del evento, toda vez que también será quien encabece la lista de delegados que acudirán en representación del PSOE de la provincia de Sevilla.
Entre dichas enmiendas figuran varias dirigidas a artículos recogidos en el apartado de la ponencia marco en el que se aborda el sistema de financiación autonómica –bajo el epígrafe 'Una España cohesionada en la diversidad'–, según se desprende de la memoria de enmiendas a la ponencia.
De esta manera, y en un contexto marcado por el cupo catalán acordado entre el PSC y Esquerra Republicana de Cataluña (ERC) este pasado verano, hay varias enmiendas registradas desde provincias andaluzas que apuestan por sustituir el término de «singularidades» respecto al modelo de financiación por el de «desequilibrio vertical».
En concreto, la ponencia marco recoge un artículo –el número 296– que plantea que «el primero y más urgente» de los «desafíos» que España debe afrontar para convertirse en un país «territorialmente justo y cohesionado» es «lograr un sistema de financiación autonómica que sea más justo y sostenible», y al respecto sostiene que el actual no resuelve «adecuadamente el problema de las singularidades territoriales, y nos impide recaudar los recursos necesarios para hacer frente a las nuevas realidades demográficas y climáticas, que exigen mayores niveles de inversión en servicios básicos e infraestructuras».
Este punto ha recibido enmiendas de sustitución procedentes de agrupaciones del PSOE de Cádiz, Sevilla, Jaén y Granada, que coinciden en plantear que, en vez de «singularidades», se hable de «desequilibrio vertical». De esta manera, proponen que en la ponencia marco se pueda leer que «el actual sistema –de financiación autonómica– tampoco resuelve adecuadamente el problema del desequilibrio vertical e impide que las comunidades autónomas dispongan de los recursos necesarios para hacer frente a las nuevas realidades demográficas y climáticas, que exigen mayores niveles de inversión en servicios básicos e infraestructuras».
Inspiración en Australia
Por otro lado, militantes de Jaén han presentado una enmienda de adición, que se ha unificado con otras procedentes de las también provincias andaluzas de Cádiz, Granada, Huelva y Sevilla, en la que se propone incluir la idea de que, «para reducir el peso de la política en la financiación autonómica transformándola en un problema técnico, es necesario valorar sistemas como la creación de una autoridad independiente, al modo del federalismo fiscal australiano (Commonwealth Grants Commission), que garantice que el sistema de transferencias actúe bajo el principio de garantizar que todas las comunidades autónomas tengan capacidad de prestar el mismo nivel de servicios, cuando realizan el mismo esfuerzo para recaudar ingresos y gestionan el gasto con el mismo nivel operativo de eficiencia».
De igual modo, desde Granada se ha presentado una enmienda de sustitución sobre los objetivos que plantea la ponencia marco de cara a la reforma pendiente del sistema de financiación autonómica, ante la idea de que dicha reforma «compatibilice multilateralidad y bilateralidad con un común denominador del sistema perfectamente conciliable con el adecuado, que no privilegiado, tratamiento de las singularidades y el mantenimiento de la solidaridad e igual esfuerzo fiscal».