Españoles Post Brexit (V)
Las empresas españolas aprovechan las oportunidades de un mercado británico abierto y transparente
Importantes sociedades españolas, como Iberdrola, Ferrovial o FCC Construcción, se están expandiendo en el mercado del Reino Unido pese a la salida del país de la Unión Europea
Iberdrola anunció hace pocos días el proyecto East Anglia Three, un gran parque de energía eólica marino con una inversión de más de 7.700 millones de euros. Por su parte, Ferrovial es el principal accionista del aeropuerto de Heathrow, con un 25 % de su accionariado. Sin embargo, en las últimas semanas hay fuertes rumores que apuntan a que la entidad española quiere desprenderse de su participación en la infraestructura, que, de acuerdo con la empresa de inversión JP Morgan, tiene un valor que supera los 23.400 millones.
Asimismo, FCC Construcción es la empresa constructora española que más crece a nivel internacional entre las compañías de su sector. En lo que va de año su facturación ha subido fuera de España un 44,2 %, frente al 7 % dentro de nuestro país. Este crecimiento ha llevado a que el peso internacional de FCC sea de 22.024 millones de euros, el 58 % de su facturación global. El mercado británico es uno de los motivos principales de crecimiento de FCC a nivel internacional.
Los datos presentados por FCC relativos al primer semestre de este año reflejan un crecimiento de la empresa en el sector de la construcción del 29,8 %, y a estos resultados no les es ajeno el mercado británico, donde la compañía española está conquistando importantes contratos.
Mian Langellier, director comercial de FCC Construcción para Reino Unido e Irlanda, muestra con orgullo que en los dos últimos años la compañía ha ganado tres grandes contratos en la isla por valor de casi 3.000 millones de euros, el primero de ellos para la construcción de la autopista A465, en Gales y por valor de 600 millones de £ (717 millones de €), además de un hospital en Jersey con un presupuesto de 650 millones de £ (777 millones de €), y un túnel bajo el célebre conjunto megalítico de Stonehenge, con un presupuesto de 1200 millones de £ (1.434 millones de €). Esta última es una obra emblemática para FCC Construcción por su impacto social.
La solvencia de FCC
El director comercial de FCC en Gran Bretaña pone de manifiesto que su estrategia para conseguir estos contratos pasa por la calidad de proyectos presentados, la solvencia de la empresa, los equipos y aliarse con partners locales. «Hasta ahora –afirma Langellier– hemos integrado buenos equipos con directores de proyectos, en muchos casos procedentes de España». La estrategia de la firma tanto en construcción como en servicios públicos y temas ambientales no solo pasa por concursar en grandes proyectos sino también por proyectos locales. Langellier afirma que «han sido dos años buenos para FCC en Reino Unido basados en equipos con gente experimentada en contratación en el Reino Unido y nuestro plan en continuar el crecimiento los próximos dos años».
El directivo de la constructora también asevera que no existe prevención alguna en el mercado británico por el origen español de FCC Construcción, donde la compañía opera desde hace ya 13 años. «Se conoce que somos españoles pero el mercado británico es abierto y transparente. No es un club cerrado, cualquiera puede concursar».
A pesar del Brexit la relación entre Irlanda y Reino Unido no se ha complicado, ya que existe un vínculo muy abierto entre ambas naciones. Los trámites para ir de una isla a otra, aunque una esté dentro de la UE y la otra no, no requieren de visado. Langellier expone los principales problemas derivados del Brexit, que pasan por «más burocracia, dificultades para contratar personal y falta de materiales». Este último aspecto los lleva a buscar proveedores dentro del Reino Unido para poder garantizarse el suministro. «Para nosotros las dificultades para contratar personal, en el ámbito de la construcción mucho procedía de Europa del Este, es un problema», subraya el director comercial de FCC en Gran Bretaña.
Además, Mian Langellier cree que «el Gobierno británico es consciente de estas dificultades», y por ello «han relajado las normas para la entrada de materiales en el país». En este sentido destaca la gran labor de la Cámara de Comercio de España.