25 Interparlamentaria del PP
Feijóo usará «todas las herramientas del Estado de Derecho» para conseguir «la cordialidad lingüística» en España
Recuerda que es «ilegal» vetar el castellano, pide a independentistas «no imponer su forma de pensar» y reclama al PSOE «sentido de Estado»
El presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, ha hecho referencia a la manifestación en defensa del castellano que este domingo discurrió por las calles de Barcelona, avisando de que mientras el PP esté en la oposición seguirá acudiendo a la justicia para interponer recursos de inconstitucionalidad cuando sea necesario y avanzando que, si algún día gobierna, va a aplicar «todas las herramientas del Estado de Derecho para conseguir la cordialidad lingüística en España, garantizar el conocimiento de las lenguas y garantizar la libertad en el conocimiento y libertad de las lenguas de España»,
Interparlamentaria
Durante la intervención que ha servido para poner el punto y final a la Interparlamentaria que el PP celebra en Toledo, ha abundado en que es «ilegal e injusto» vetar el español, ya que «estamos en un Estado de Derecho», razón por la que ha pedido al «independentismo catalán y vasco que dejen de imponer su forma de pensar y su forma de actuar»; al tiempo que ha demandado al PSOE que «mantenga una política de sentido del Estado y que ayude al PP a volver a las políticas de Estado, incluidas las lingüísticas».
Ha mandado un recuerdo a «todos aquellos que se están manifestando en cualquier lugar de España y en las calles de Barcelona» para pedir y exigir el ejercicio de sus derechos y libertades «y especialmente el ejercicio del derecho a conocer y hablar la lengua común del Estado».
Nuestro proyecto con la lengua es irrenunciable, el de la cordialidad lingüística en todas las comunidades autónomas
«Sin duda, nuestro partido tenía que estar allí. Y es verdad que teníamos que dividirnos, y agradezco mucho a toda la colectividad de cargos que han venido de Cataluña, que vino ayer y se volvió ayer por la noche para acreditar que todos los que estamos aquí, también estamos allí», ha indicado.
Continuando con su intervención, ha recordado que él viene de una tierra «con dos idiomas», por lo que nadie tiene que explicarle «qué es querer a esos dos idiomas».
Ha recordado que ya se ha pronunciado de forma explícita: «Nuestro proyecto con la lengua es irrenunciable, el de la cordialidad lingüística en todas las comunidades autónomas que tienen el privilegio de tener dos lenguas».
Ilusión y esperanza
Por ello, «nadie en Cataluña tiene el derecho de revolverse porque haya personas que quieran hablar en España y nadie en España tiene que revolverse porque los catalanes quieran hablar catalán».
«Y nadie en Cataluña ni en ningún lugar de España donde se hablan dos lenguas tiene derecho a impedir que nuestros hijos aprendan las dos lenguas y luego hablen en libertad la que quieran», ha zanjado.
Núñez Feijóo ha hablado de la «ilusión y esperanza» que España necesita, y aunque solo lleva cinco meses presidiendo el partido, ha considerado que es «el tiempo suficiente para saber que el PP ya es la única alternativa al Gobierno 'sanchista'». Y «con humildad pero convencimiento», se ha mostrado seguro de que esa alternativa «está hoy más fuerte que nunca».
25 Interparlamentaria del PP
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«No porque lo digan las encuestas. Siempre tenemos el apoyo incondicional del acreditado CIS para recordarnos que aún no hemos ganado las elecciones. Tampoco por las polémicas del 'reality show' que es este Gobierno. Ni siquiera porque empiecen a recolocarse soldados socialistas como si estuviéramos en el 'sálvese quien pueda», ha indicado.
Ha considerado que el mejor termómetro de la realidad es la calle, y en la calle «cada día es un clamor la confianza creciente que depositan los ciudadanos en esta formación política».
Pero no se conforma con ganar cuando otros pierden, ha dicho, por lo que ha pedido «no conformarse mientras el PP no sea digno de merecer la confianza de los españoles que están en las calles de España».
El método
En este punto, ha ofrecido un «método» en medio de un contexto con «mucho tiempo de artificio, impostura e insultos». «Debemos ser lo que millones de españoles esperan, ofrecer un proyecto de reconstrucción económica, social e institucional y poner a España a la altura de los españoles», ha remarcado.
Por ello, ha encargado a los suyos «ponerse a trabajar para arreglar todo lo que se ha hecho mal en España en los últimos cuatro años», aunque «no es fácil». «Si nos ponemos a trabajar en ello, serán meses que estamos ganando antes de llegar al Gobierno. Hagámoslo, tenemos tarea por delante», ha exhortado a sus filas.
También ha planteado poder «recuperar grandes consensos de antaño» y «reunir a los españoles, que necesitan volver a creer en los poderes públicos». Españoles que quieren «ver a un Gobierno que no se insulta y que propone trabajo», y ver a unos ciudadanos que llegan a «desgastarse en el Gobierno».
España «merece más que un Gobierno dedicado a resistir» y ahora el PP tiene la obligación de «cerrar la etapa de Sánchez, que nunca será recordada como una buena etapa».
Así, ahora toca al PP «prepararse para los retos y plantear soluciones», porque los presidentes anteriores en la historia de España «trajeron buenas noticias», trajeron la democracia, la consolidaron, colocaron a España en Europa y evitaron el «desastre».
El PP tiene la obligación de cerrar la etapa de Sánchez, que nunca será recordada como una buena etapa
Por tanto, «combinar las actuaciones urgentes con las reformas a largo plazo» es ahora el deber del PP, con una «piedra angular» que no es otra que «la política económica».
Aunque todos los países del entorno «han sufrido las crisis», España es «colista en recuperar» los niveles prepandemia pese a tener «los mayores recursos económicos que ningún gobierno ha tenido jamás», con «reglas fiscales suspendidas y 140.000 millones de fondos europeos extra».
Pero los resultados están haciendo a España «ser el peor alumno de la clase de Europa, ser el único país que no ha conseguido la riqueza que tenía antes de la pandemia y ser el país que ha incrementado su deuda el doble que el resto de países», ha ahondado.