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El Debate

El «mejor hombre» de su Gobierno

Revilla organiza una comida para 1.000 personas en homenaje al consejero que dimitió por un caso de corrupción

  • El presidente cántabro despedirá a lo grande a José Luis Gochicoa, consejero salpicado por una trama de adjudicaciones de contratos públicos

  • El menú costará 10 euros y estará compuesto por cocido montañés, merluza y arroz con leche

El presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha organizado «un gran homenaje de reconocimiento» a José Luis Gochicoa, el consejero de Obras Públicas que dimitió el pasado viernes al verse salpicado su departamento por el caso Carreteras.

Revilla ha enviado una carta a los afiliados del Partido Regionalista de Cantabria (PRC) en la que invita el próximo domingo 12 de marzo a las 14:00 horas a la militancia a una comida de despedida por su «extraordinaria e intachable labor desarrollada» al frente de Obras Públicas.

Según Revilla, se espera en el Palacio de Exposiciones de Santander la presencia «de no menos de 1.000 personas», en un convite en los que, «con una colaboración de 10 euros por comensal», los asistentes podrán disfrutar de un menú compuesto por un cocido montañés, merluza y arroz con leche.

«Varios cantantes cántabros se han ofrecido a actuar de forma gratuita», añade la misiva firmada por el propio Revilla y fechada el 6 de marzo.

El presidente de Cantabria quiere trasladar al que consideraba «el mejor hombre» de su Gobierno y a la «opinión pública de Cantabria un mensaje claro de la unidad de nuestro partido, de nuestro compromiso con los nuestros y nuestra defensa a ultranza de los intereses de la región y la honradez en el ejercicio de la política».

Revilla justifica en la carta que se «ha visto en la obligación de aceptar la dimisión de José Luis aun sabiendo que es una persona absolutamente honorable, que jamás ha cometido un desmán en su actuación pública y que tanto Cantabria como el PRC perdemos a uno de los gestores más eficaces y responsables que hemos tenido».

«2.300 km de carreteras llevan su sello»

En este sentido, el líder regionalista destaca del exconsejero que «ni más ni menos que 2.300 kilómetros de carreteras regionales llevan su sello».

«Su dimisión –continúa– es una muestra del altísimo nivel ético que los regionalistas nos imponemos a nosotros mismos, un ejemplo a la altura de lo que siempre hemos defendido en nuestra trayectoria política».

Carta de Revilla en la que invita a la militancia del PRC al homenaje al exconsejero GochicoaEl Debate

La carta finaliza –con tono de pesadumbre– invitando a los militantes del PRC a despedir a Gochicoa: «Sé que en este momento compartes el dolor que me ha producido aceptar la dimisión de José Luis y espero que no faltes el domingo, acompañado de todos los familiares y amigos que quieran sumarse al homenaje, para que entre todos le arropemos con nuestro cariño y compañerismo en esta despedida temporal de la primera línea política».

Un «fraude» con ocho detenidos

El Ministerio de Interior anunciaba el pasado 24 de febrero que la Policía Nacional había detenido a ocho personas por el conocido como caso Carreteras, entre ellas el funcionario responsable de emitir los informes técnicos que habrían favorecido a un grupo de empresas que optaron a contratos de obras de carreteras y los administradores de cuatro de las sociedades adjudicatarias.

Los agentes practicaron registros tanto en el despacho del principal investigado en la Consejería de Obras Públicas como en las sedes de las empresas adjudicatarias y en domicilios particulares de los miembros de esta trama de corrupción que le ha estallado al PRC a apenas tres meses de las elecciones autonómicas.

El funcionario subordinado de Gochicoa ocultaba en su casa 530.000 euros ocultos en una caja fuerte que estaba escondida dentro de una pared, así como una máquina para contar billetes.

Tras destaparse el escándalo, Revilla anunció que aceptaba la dimisión del consejero del ramo, quien se ha declarado totalmente ajeno a estas prácticas corruptas y cuya inocencia y honorabilidad Revilla defiende de manera tajante, afirmando que pone «las dos manos en el fuego» por él.