La guerra fratricida
Solo Montero, Belarra y una decena de cargos de Podemos forman la resistencia contra Díaz
El intento de la formación morada de evitar deserciones en el acto de Sumar de este domingo ha sido infructuoso y contraproducente, porque ha evidenciado la soledad de su cúpula menguante
Podemos reúne este sábado a su Consejo Ciudadano Estatal y, salvo giro copernicano, oficializará que no va a acudir al acto de Yolanda Díaz y Sumar del domingo, ante la falta de un acuerdo previo.
Viendo que el intento de fumata blanca del pasado fin de semana fue infructuoso -Podemos rechazó una propuesta de Díaz-, el partido de Ione Belarra trató de decretar, a comienzos de semana, una especie de ley marcial y prohibir a sus cargos públicos y orgánicos que asistieran.
Sin embargo, la estrategia ha acabado volviéndose en contra de la formación morada, evidenciando así la soledad de su cúpula menguante. No en vano, en las últimas 72 horas ha habido un goteo constante de deserciones. La única forma de enmascararlo sería que este sábado el partido diera libertad a sus dirigentes para elegir si van o no al polideportivo Magariños, pero Podemos no está en eso.
Los irredentos de Podemos están encabezados por Belarra, Irene Montero, Lilith Verstrynge, Pablo Echenique, Isa Serra, Pablo Fernández, Ángela Rodríguez, Javier Sánchez Serna, Julio Rodríguez, Rafa Mayoral, Alejandra Jacinto y María Teresa Pérez.
Yolanda Díaz tiene convencida a la dirección de Podemos en Galicia. Tanto a su actual líder, Borja San Ramón, como a su antecesor y uno de los hombres de la más estricta confianza de la vicepresidenta segunda, el diputado Antón Gómez Reino. Este último es miembro del Consejo Estatal del partido, el órgano de dirección.
Ambos estarán en la entronización de Díaz como candidata, como también la coordinadora del partido en Navarra, Begoña Alfaro. Ésta es también la candidata de Contigo Navarra (candidatura en la que están Podemos, IU, Batzarre, Alianza Verde, Equo) a las elecciones del 28 de mayo. Su rebeldía tiene un significado especial, puesto que Navarra es la tierra de Belarra.
Además, la también ministra de Trabajo cuenta con el respaldo explícito del líder de Podemos en Baleares y actual vicepresidente de las islas, Juan Pedro Yllanes, que este viernes avisó a su partido de que se está equivocando en presionar a Díaz. «El momento no es oportuno. Lo que hay que hacer es no poner condiciones, sin perjuicio de que luego se pueda dialogar y alcanzar consensos necesarios», sostuvo en una entrevista en La Sexta.
Yllanes no podrá ir, como tampoco la candidata de Podemos Asturias a las elecciones del 28-M, Cova Tomé, que también ha respaldado públicamente a la gallega y su proyecto. Y, asimismo, la eurodiputada de Podemos Eugenia Palop.
Mientras las fuerzas de Podemos merman, las de Díaz no dejan de crecer. Este sábado, en paralelo al Consejo Ciudadano Estatal de Podemos, también Izquierda Unida celebrará una reunión de su Coordinadora Federal. Alberto Garzón se ha convertido en uno de los más firmes apoyos de Díaz.
En su cita de hoy, el también ministro de Consumo presentará un informe político en el que defenderá Sumar a ultranza. Y pedirá que la plataforma sea vista «como una oportunidad para reconstruir las alianzas rotas, no como una amenaza», en alusión a Podemos. Además, aconsejará a todos los partidos del espacio «estar a la altura del momento histórico» para ensanchar la confluencia entre las distintas organizaciones.
Hasta la fecha, Díaz ha reclutado para su proyecto a IU, Más País, los Comunes, el PCE, Verdes Equo, Compromís, Alianza Verde, Chunta Aragonesista, Més per Mallorca y Proyecto Drago, la aventura canaria del exsecretario de Organización de Podemos, Alberto Rodríguez.
La socia de Pedro Sánchez cuenta también con el apoyo del Partido Verde Europeo y del Partido de la Izquierda Europea. Los líderes de ambos Mélanie Vogel y Walter Baier, estarán este domingo en Magariños. Y, asimismo, representantes de CCOO y UGT.
Ante la falta de acuerdo de cara a este 2 de abril, en Podemos asumen que tampoco lo habrá antes de las elecciones municipales y autonómicas del 28 de mayo. Acusan a Díaz de pretender, con la colaboración y complicidad de Pedro Sánchez, dilatar cualquier proceso de negociación a la espera de que los morados obtengan un mal resultado en las urnas.