El motivo de la transformación de Sánchez ante Meloni, explicado por él mismo

El día después de la victoria de Giorgia Meloni, la vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, compareció con gesto en Ferraz y proclamó la «preocupación» de su partido por la posibilidad de que Italia tuviera un gobierno de «ultraderecha». Montero llegó a afirmar que el partido Hermanos de Italia «va en contra de la construcción europea».

No fue menos tajante la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, que tildó el triunfo de Meloni de «muy triste y preocupante». Porque Italia, según la socia de Pedro Sánchez, estaba «siguiendo los pasos de Hungría y Polonia».

El presidente del Gobierno no felicitó a Meloni cuando ganó las elecciones, como sí lo hizo de forma inmediata con el nuevo primer ministro británico, Rishi Sunak, con el presidente brasileño, Lula da Silva, y con la reelegida primera ministra danesa, Mette Frederiksen. Sánchez, de hecho, se tomó su tiempo en telefonear a Meloni, solo cuando hubo tomado posesión como primera ministra. En concreto, dejó pasar 11 días.

Sin embargo, este miércoles el presidente español obvió todo lo anterior se deshizo en elogios hacia Meloni, haciendo virtud de la necesidad de tener una buena relación con el Gobierno de Italia. No solo por la relación bilateral, sino también porque dentro de apenas tres meses España ostentará la Presidencia de turno de la UE. Y el presidente español pidió a Meloni su apoyo. Es la realpolitik.

De hecho, en una conversación informal con los periodistas en el avión de vuelta a España, el líder del Ejecutivo afirmó que su viaje a Roma tenía como propósito buscar consensos de cara al semestre español; y no resaltar las diferencias.

Preguntado por el entendimiento exhibido en cuestiones como la lucha contra la migración ilegal, la reforma del mercado energético europeo y las reglas fiscales, a pesar de que para los socialistas Meloni es como Santiago Abascal, Sánchez hizo hincapié en que son espacios distintos, según Efe. No es lo mismo, a juicio del presidente español, el debate político que la relación entre dos socios con intereses similares que intentan ponerse de acuerdo ante retos de la UE.

Durante su declaración conjunta, Sánchez dijo de Meloni cosas como éstas: «Es muy importante esta relación estratégica entre España e Italia. Es fundamental». «Como has dicho, Giorgia, presidenta, calles, plazas, universidades, tanto en España como en Italia, hay multitud de estudiantes Erasmus, turistas, empresarios provenientes del otro país. En fin, nuestros lazos siguen vivos».

También: «Mi lección de mi experiencia política a lo largo de estos años, desde luego, es la de que juntos, con Italia y España, hacemos a nuestras sociedades más fuertes y hacemos también a Europa más fuerte». Y: «La sociedad española es una sociedad que quiere a Italia, que respeta a Italia, que admira a Italia, y que lo que quiere es tener los mejores vínculos y las mejores relaciones con el Gobierno italiano».