Arnaldo Otegi, en el momento de votar
Trece etarras estarán en las instituciones vascas y navarras gracias a Bildu
Dos de los condenados por asesinato salen elegidos en Errezil (Guipúzcoa) y Berrioplano (Navarra)
Trece candidatos condenados por pertenencia a organización terrorista de las polémicas listas que Bildu presentó a las instituciones vascas y navarras han resultado elegidos tras los comicios de este 28 de mayo.
Entre ellos se encuentran dos personas que han sido condenadas por asesinato. Concretamente se trata de Begoña Uzkudun, que se chivó del regreso del exconcejal de UCD, José Larrañaga, para que ETA le asesinara en 1984 en Azcoitia (Guipúzcoa), y de Carlos Arriaga, que vigiló y pasó la información necesaria para asesinar a Jesús Alcocer en Pamplona también en 1984.
Las listas de sangre de Bildu
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Estos dos etarras han salido elegidos por los ayuntamientos de Errezil (Guipúzcoa) y de Berrioplano (Navarra) respectivamente, aunque el pasado día 16 aseguraron que no tomarían posesión de sus cargos. Sin embargo, a día de hoy, son concejales electos puesto que estaban en las listas.
Pertenencia a banda armada
Sin embargo, también hay otros 11 concejales electos que han sido condenados por pertenencia a banda armada. Entre ellos destaca Asier Altuna, condenado por trasladar al comando y guardar el coche con el que ETA pretendía asesinar al concejal socialista de Eibar, José Luis Vallés, y que será el próximo alcalde de Azcoitia (Guipúzcoa).
También destaca la presencia de Andoni Lariz, el próximo alcalde de Cenarruza-Bolívar (Vizcaya), que fue condenado en Francia a 5 años y 3 meses de prisión por formar parte del aparato logístico de ETA.
Los demás concejales elegidos por Bildu que han cumplido condena por delitos relacionados con el terrorismo de ETA son:
Concejales condenados por terrorismo
- Gorka Betolaza (Barrundia, Álava): Condenado en 2007 a 6 años de prisión por pertenencia a organización terrorista al ser dirigente de SEGI, el frente de juventudes de ETA. Además, en 2009 fue condenado a 4 años de cárcel por atacar con explosivos y cócteles molotov varias entidades bancarias.
- Sonia Respaldiza (Llodio, Álava): Apareció en los papeles intervenidos al jefe militar de ETA, Ibón Fernández de Iradi 'Susper'. En los papeles de Susper se dice que «su futura implicación podría incluir hasta su integración en un comando armado».
- Aloña Muñoa (Ormáiztegui, Guipúzcoa): Condenada en 2005 en Francia por participar en asociación de malhechores para la perpetración de un acto terrorista.
- Urko Mantzizidor (Busturia, Vizcaya): condenado en 2004 a 2 años de prisión por actos de sabotaje a entidades bancarias y de seguros.
- Egoitz Apaolaza (Segura, Guipuzcoa): condenado en 2016 a 1 año y 6 meses de prisión por integración en organización terrorista como dirigente de Batasuna.
- Zaloa Zenarrutzabeitia (Echevarría, Vizcaya): Condenada en 2009 como miembro de SEGI a 6 años de prisión por pertenencia a organización terrorista.
- Egoitz Garmendia (Ochandiano, Vizcaya): Condenado a 2 años de prisión por pertenencia a organización terrorista como responsable en Álava de EKIN, el grupo responsable de transmitir las órdenes de ETA.
- Urtza Alkorta (Ondarroa, Vizcaya): Condenada en 2013 a 5 años de prisión por un delito de colaboración con ETA al ayudar al comando con actividades de correo, información y acompañamiento.
- Jon Garai (Ansoain, Navarra): Condenado en 2016 a 2 años de prisión por un delito de integración en organización terrorista como dirigente de Batasuna.
- Iker Isiegas (Basaburua, Navarra): Condenado en 2004 a 3 años de prisión por intentar colocar un artefacto explosivo en un banco de Pamplona en 1999.
- Adolfo Aráiz (Parlamento de Navarra): Miembro de la cúpula de Herri Batasuna que aprobó la ponencia Oldartzen, la que inició la «socialización del sufrimiento».
Todos ellos están condenados por delitos relacionados con el terrorismo y, según aseguró Arnaldo Otegi el pasado 16 de mayo, no tienen ninguna intención de renunciar a su cargo puesto.
