El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, se quejó esta misma semana que Sánchez les trataba como un Kleenex
PSOE y PNV se unen para controlar el poder local en el País Vasco: apartan a Bildu de 17 ayuntamientos
Ambas formaciones reeditan el pacto que ya firmaron en 2019 pero que no impide que PSOE y Bildu pacten en Madrid
El PSE y el PNV han sumado sus fuerzas para arrebatar a Bildu un buen puñado de ayuntamientos en el País Vasco, 17 concretamente. Reeditan de esta forma el pacto que firmaron en 2019 y que les llevó a controlar el poder local en Euskadi y compartir el Gobierno vasco.
Bildu concluyó la jornada electoral del 28 de mayo con una amplia sonrisa al verse vencedora en número de concejales respecto al PNV y el resto de fuerzas políticas puesto que los abertzales sumaron los logrados en Navarra. Sin embargo, su alegría duró poco y el mismo lunes socialistas y nacionalistas comenzaron a reeditar un acuerdo que les llevará a tomar el dominio municipal en el País Vasco.
Papel fundamental del PP
No obstante, este pacto podría tener unas consecuencias mucho más profundas si estas dos formaciones tienen en cuenta al Partido Popular o éste les da sus votos de forma gratuita ya que podría quitar a Bildu del Ayuntamiento de Vitoria, que pasaría a manos socialistas, y la joya de la corona, la Diputación de Guipúzcoa, que pasaría al PNV de manera que los nacionalistas controlarían las tres diputaciones vascas y sus casi 20.000 millones de euros de presupuestos anuales.
Por el momento, tanto PNV como PSE han rechazado incluir al Partido Popular en la ecuación, pero desde el mismo domingo, el PP ofreció sus votos en el País Vasco para desbancar a Bildu en el mayor número de instituciones.
Pactos en Madrid
El pacto vasco del PSOE y el PNV viene desde el año 2019 y éste no ha impedido que a lo largo de toda la legislatura socialistas y Bildu hayan pactado en numerosas ocasiones, desde los Presupuestos hasta las leyes más importantes del Gobierno PSOE-Podemos.
Ahora habrá que ver también si este acuerdo autonómico tiene consecuencias en Navarra, donde la socialista María Chivite necesita obligatoriamente el visto bueno de Bildu, sea a través del voto favorable o de la abstención.
