Tribunales
La izquierda del TC renuncia a la batalla por los votos nulos de Madrid y se reserva para la amnistía
Entre la «beligerancia» del bloque socialista durante el trámite de admisión del recurso de amparo electoral y la unanimidad contra el fondo del asunto «hubo un evidente cambio de actitud»
«no parecer una sucursal del PSOE» en cada una de las causas que llegan al Constitucional. Este martes, el sector de la izquierda de la Sala Segunda del TC aceptaba sin demasiadas reticencias el borrador de sentencia presentado por la magistrada Laura Díez, nombrada por Pedro Sánchez en la última renovación del órgano, para desestimar el recurso de amparo planteado por los socialistas contra el recuento de los votos nulos del exterior en Madrid que, el pasado 23-J, daba la victoria a los populares por un sólo escaño en dicha comunidad. Entre la «beligerancia» del bloque más afín al Gobierno durante el trámite de admisión y el resultado final, negativo sobre el fondo del asunto, «hubo un evidente cambio» de actitud, apuntan a El Debate fuentes próximas a la Corte de Garantías.
Y es que, revisando con detalle los precedentes, hay muy pocos ejemplos en los que el TC hubiese aceptado analizar recursos de tipo electoral si ya a priori no se tiene la certeza de que «van a prosperar en su resolución final». «Lo contrario es crear una falsa expectativa de que pueden cambiarse los resultados de unos comicios» cuando la realidad es que –como ha ocurrido en este caso, tanto con el voto particular emitido por el magistrado Enrique Arnaldo, como con el informe del fiscal Pedro Crespo, como en la ponencia finalmente convertida en sentencia unánime del órgano– no existe «un derecho general e inopinado de revisión» de los votos, como tal.
La «posición trabada» de los magistrados Ramón Sáez, Inmaculada Montalbán (presidenta de la Sala Segunda y vicepresidenta del Constitucional), María Luisa Balaguer y de la propia Díez, como ponente, con un «extenso alegato» a favor de admitir el recurso del PSOE contra la sentencia del Supremo que negó el nuevo recuento electoral en Madrid, se «suavizó» días después de la Apertura del Año Judicial y tras el contundente informe del Ministerio Público del TC oponiéndose a dicha posibilidad.
Varapalo del Ministerio Público
La Fiscalía empuja al TC a desestimar el intento de Sánchez por recontar los votos nulos de Madrid
Precisamente, fue en los habituales corrillos del acto solemne de vuelta al curso judicial celebrado en la sede del Alto Tribunal donde algunos magistrados miembros de la Junta Electoral Central y de la Sala Tercera de lo Contencioso-Administrativo –que rechazó el recurso del PSOE por el voto exterior de Madrid– no ocultaron su «discreta y respetuosa incomprensión» ante las dudas sembradas por la admisión a trámite del mismo por parte de sus compañeros del sector de la izquierda de la Corte de Garantías. Un escenario que, a su juicio, provocaba una inseguridad innecesaria en el correcto funcionamiento del proceso electoral y de sus controles reforzados en España.
Ni una sola palabra, en cambio, sobre la amnistía. Ni siquiera en el ambiente informal que, tras los discursos institucionales del presidente interino del Supremo Marín Castán y del fiscal general García Ortiz, se respiraba en el tradicional cóctel y por los pasillos. Palabras mayores que el Pleno del TC, con Cándido Conde-Pumpido en cabeza, tendrá que resolver llegado el momento. Así las cosas, el sector de la izquierda del Tribunal Constitucional ha preferido renunciar a la batalla por unos votos –que nadie podía asegurar que recayesen del lado socialista para abaratar la investidura de Sánchez– y «reservarse para lo que está por llegar y hacerlo, entonces, blanqueado» hacia la opinión pública.