El líder de Vox Santiago Abascal (i) junto a la portavoz del partido en el Congreso Pepa Millán (2i)
El Pleno debate hoy la iniciativa de Vox para volver al Código Penal anterior al 'solo sí es sí' y endurecer las penas
El partido de Abascal propone recuperar la distinción entre abuso y agresión sexual, que quedan fusionados en un mismo tipo penal con la ley impulsada por Irene Montero hace más de un año
El Pleno del Congreso debatirá este martes la proposición de ley para la modificación de la Ley Orgánica 10/1995, del 23 de noviembre, del Código Penal, en materia de delitos contra la libertad e indemnidad sexuales. Una iniciativa con la que pretenden volver al Código Penal anterior a la ley de garantía integral de la libertad sexual, conocida como la ley del 'solo sí es sí' y endurecer las penas para quienes cometan delitos sexuales.
El partido de Santiago Abascal registró su propuesta el pasado mes de octubre en la Cámara Baja, cuando se cumplía un año de la entrada en vigor de la polémica norma que, pese a los intentos de la oposición por frenarla y las advertencias sobre sus consecuencias durante la tramitación parlamentaria, ha dejado en la calle a más de un centenar de agresores sexuales y ha beneficiado con rebajas de condena a más de mil. Por ello, Vox, que recurrió la ley ante el Tribunal Constitucional, pide que se recupere la distinción entre abuso y agresión sexual y que se endurezcan las penas por delitos de índole sexual.
El grupo parlamentario defiende en su texto que la norma es injusta entre otras cosas porque equipara dos delitos con distinta gravedad y que por tanto deberían tener consecuencias penales distintas, y porque ha sido «la herramienta que ha propiciado la excarcelación prematura y la reducción de condena de cientos de delincuentes sexuales».
El partido subraya en la exposición de motivos su preocupación por la alarmante tendencia al alza de las llamadas «violaciones en manada» –cuyo aumento relacionan con la importación de delitos de otras culturas– y los delitos sexuales cometidos contra menores o personas con discapacidad. «Para realizar eficazmente la labor de prevención de estas conductas sexuales, gravemente ilícitas y con frecuencia tendentes a la reincidencia, es necesario elevar las penas aparejadas a ellas», remarca Vox.
Así, la formación propone que se califique a las primeras como delito de violación conjunta y estén penadas con la prisión permanente revisable. En el caso de las segundas, pide que se aumenten las penas privativas de libertad y se elimine la opción de que el pago de una multa sea alternativa, en ningún caso, a la pena de cárcel.
Además, en su proposición de ley, los de Abascal instan a ampliar la tipificación de la «agravante de superioridad» de manera que incluya a aquellos que, por su condición de empleados de entidades que colaborar con las Administraciones Públicas, tienen a su cargo a menores, así como a limitar los supuestos de exclusión de la responsabilidad del autor por consentimiento libre del menor de dieciséis años.
Respecto a los delitos sexuales cometidos contra adultos, además de la tipificación del nuevo tipo penal ya citado de violación conjunta, Vox plantea que se elimine la posibilidad de reparar el daño con el mero pago de una multa; que a la persona jurídica responsable de cualquier delito de prostitución, explotación sexual y corrupción de menores se le impongan obligatoriamente las penas accesorias del artículo 33.7 –que recoge desde la multa por cuotas o la disolución de la persona jurídica hasta la intervención judicial–.
Además, propone que, si el autor de estos delitos no nacional español tiene permiso de residencia legal, lo pierda; si el autor es residente ilegal en España, se produzca su expulsión inmediata del territorio nacional; y si el autor ha adquirido la nacionalidad española por requisitos legales, la pierda.
