Page señala que el PSOE está «en el extrarradio» de la Constitución y afirma que «no hay terrorismo bueno y malo»

El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha expresado este miércoles que considera que el PSOE se encuentra ahora mismo «en el extrarradio de la Constitución, a punto de pisar la frontera constitucional», después de que alcanzara este martes un pacto con Junts para acotar los delitos de terrorismo que se incluyen en la ley de amnistía pactada con los separatistas catalanes. Y en este sentido, ha afirmado que «no hay terrorismo bueno y terrorismo malo».

Así lo ha trasladado el dirigente socialista a preguntas de los medios durante la inauguración del stand de Castilla-La Mancha en la Feria Internacional de Turismo (Fitur) que se ha inaugurado esta mañana en Madrid en declaraciones recogidas por Europa Press. Si bien Page ha señalado que el PSOE a su juicio «no es un partido del que se pueda dudar constitucionalmente» ya que «tiene muy claro lo que es» la Carta Magna, ha defendido, sí ha manifestado que espera que esa «frontera constitucional» no se pase nunca por su formación es «esencial» como partido y «en la estructura constitucional del país».

García-Page ha manifestado que cree que el independentismo catalán «no busca solo la amnistía» , sino «la impunidad» y que es «más prudente» esperar a ver «el texto final o la última exigencia que tenga Puigdemont». «No quiero ser un comentarista del día a día», ha apostillado. Sin embargo, sí ha afirmado que «no hay terrorismo bueno y terrorismo malo». «Terrorismo significa tener intención de generar terror y, obviamente, hubo mucha gente organizadamente en aquellos días en Barcelona, en Cataluña, que quiso generar terror social. Eso es evidente», ha aseverado, señalando que es, además, algo que deben decir los jueces y no los políticos. «Es hora de que se respete a los jueces en su función de aplicar las leyes», ha defendido.

Preguntado por si le duele que los diputados elegidos por las circunscripciones de Castilla-La Mancha validen estos acuerdos, ha respondido que los diputados «se deben a sus votantes, no a los virreyes ni a los barones provinciales ni regionales».

«Esto no funciona así, sería muy malo para España. Lo que se decide en los grupos parlamentarios es lo que se decide por democracia, en votaciones internas, y ese es el voto que tienen que defender. Yo supongo que muchos están sufriendo, pero no soy quién para dar órdenes. A mí ya hace mucho tiempo que no me hace caso ni el Siri del teléfono».