Con los 28 millones del fichaje de Broncano podrían comprarse más de 10 lanchas rápidas para la Guardia Civil

Con los 28 millones de euros que ha costado el fichaje por dos temporadas de David Broncano y su programa La Resistencia podrían atenderse muchas necesidades urgentes que reclaman los ciudadanos.

Por ejemplo, 28 millones es el presupuesto anual de municipios como Amurrio o Villanueva de la Cañada. También es lo que cuesta mantener durante tres años los 315 kilómetros de carreteras y autovías de toda la provincia de Salamanca. O lo que vale conservar, cuidar y proteger el Parque Nacional de Guadarrama.

Estas son algunas de las muchas necesidades que podrían ser atendidas con 28 millones de euros:

• Comprar 10 lanchas súper rápidas para la Guardia Civil que combate a los narcos en el Estrecho y puedan disponer de medios similares a los de la Gendarmería Real de Marruecos. Cada una de estas lanchas cuesta unos 2,5 millones de euros.
• Destinar ayudas a los enfermos de ELA (Esclerosis Lateral Amiotrófica), algunos de los cuales se sienten empujados a pedir la eutanasia porque no tienen medios para pagar los cuidados que necesitan para vivir. La puesta en marcha de la ley ELA costaría unos 38 millones de euros, y el Gobierno de Sánchez la mantiene bloqueada.
• Combatir la pobreza infantil y que España deje de ostentar el vergonzoso título de liderar esta tasa en la Unión Europea. Según el presidente de Unicef España, Gustavo Suárez Pertierra, «detrás de estas cifras hay niños, niñas y adolescentes que no pueden permitirse comer carne, pollo o pescado al menos una vez cada dos días, ni fruta y verdura a diario, que viven en casas sin una temperatura adecuada, que no cuentan con ropa, calzado o libros adecuados, o que no pueden participar en actividades de ocio o irse de vacaciones una vez al año».
• Formar y contratar más médicos. Ya hay escasez de facultativos, pero en los próximos años el problema se agravará porque se jubilarán 80.000 médicos en España. Por ello, urge crear nuevas plazas de formación en las universidades y en hospitales, porque el actual número de plazas MIR no es suficiente para afrontar el relevo generacional.
• Ayudar a los afectados por el volcán de La Palma. Dos años y medio después de que el volcán entrara en erupción y destruyera parte de la isla, todavía hay muchos afectados que duermen en casas-contenedor, hoteles, residencias familiares o casas de alquiler.
• Mejorar infraestructuras básicas, como tramos de carreteras, sistemas de riego o canalizaciones, que permiten mejorar la calidad de vida de muchos ciudadanos o ayudarles a prosperar.