Barco en el que este lunes llegaron más de un centenar de inmigrantes a Baleares
Suman ya más 380 inmigrantes los llegados a Baleares en las últimas 24 horas
Las mafias, subsaharianas y magrebíes, presionan a la isla de Cabrera, la más pequeña del archipiélago
Con la localización esta madrugada de dos nuevas pateras en las cercanías de la isla de Cabrera, en las Islas Baleares, son ya 382 las llegadas a esta parte del Mediterráneo.
Según la información de Delegación del Gobierno, a las 06:22 horas de este miércoles se ha rescatado a 15 personas de origen subsahariano, en aparente buen estado de salud a unas 16 millas al sur de Cabrera con la intervención de Salvamento Marítimo de la Guardia Civil.
Más tarde, a las 06:50 horas, se ha rescatado a 18 personas más de origen magrebí, en aparente buen estado de salud, a una milla al sur de la isla de Cabrera también con la intervención de Salvamento Marítimo, Servicio Marítimo Provincial de la Guardia Civil.
Este miércoles ya se había confirmado de dos nuevas pateras con 32 migrantes en total llegados durante la noche a Formentera, cuando este martes ya se superaron las 300 llegadas.
La mayor patera de la historia
Buena parte de ellos, más de 100, llegaron en la mayor patera localizada hasta el momento en esta parte del Mediterráneo ya que las pateras no suelen superar la veintena de inmigrantes.
Algo más pequeñas son incluso en la zona del Estrecho de Gibraltar, puesto que en este lugar mezclan el transporte de inmigrantes con el transporte de droga. Pero la presión policial en el Estrecho obliga a las mafias a desplazar el recorrido de las pateras más hacia aguas adentro del Mediterráneo, por lo que este verano está subiendo significativamente el rescate de pateras en las Islas Baleares.
Con esta nueva oleada de pateras, son ya más de 3.000 los inmigrantes llegados a Baleares en lo que llevamos de año, una cifra muy superior a la producida en todo el año 2023, cuando fueron 2.278 los llegados.
Además, se da la circunstancia de que la presión migratoria está llegando con especial fuerza a las islas más pequeñas, Cabrera y Formentera, que, a su vez, son las menos preparadas, por dimensiones y por menos experiencia en la llegada de inmigrantes.
