Clavijo afea al Gobierno estar «ausente» en la crisis migratoria de Canarias y reclama un «acuerdo de país»

El presidente del Gobierno de Canarias, Fernando Clavijo, ha reprochado al Ejecutivo estar «ausente» ante el «drama migratorio» que se vive en las islas, y poner «excusas» al señalar que las competencias de los menores son de las comunidades autónomas. «No puede ser que en todo este drama el Gobierno haya estado mirando para otro lado», ha criticado en la rueda de prensa tras su reunión con Pedro Sánchez en el Palacio de la Moncloa, en el marco de la ronda de conversaciones que el presidente mantiene con los líderes regionales para abordar la financiación autonómica.

Así, Clavijo ha pedido al Gobierno central que ponga recursos, y también que haya un tratamiento singular para el archipiélago. Según ha señalado, Sánchez le ha transmitido que antes de final de mes estarán ingresados en Canarias los 50 millones de euros que acordaron, si bien para el dirigente canario esto no es suficiente, y ha reclamado 160 millones. Ha indicado, en este sentido, que en los próximos días mantendrá una reunión con la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, para «examinar» esa reclamación para que el Estado «no solo no se ponga de perfil, sino que asuma las obligaciones inherentes a las políticas de inmigración y de control de fronteras que tiene asignadas por la Constitución».

El presidente de Canarias ha dicho sentirse «muy decepcionado» tras el debate en el Pleno del Congreso celebrado este miércoles, donde estaba previsto hablar fundamentalmente de inmigración y no fue el tema que centró ese debate. Clavijo ha criticado tanto al PP por no ceñirse a esta cuestión como al PSOE, reprochando a Patxi López que comparara a los menores inmigrantes con los turistas. «¿Ese es el nivel de este país?», ha señalado, afeando a ambos partidos haber querido convertir este drama humanitario en un problema «político y territorial».

En este sentido, ha dicho no comprender la ruptura de negociaciones sobre la reforma de la ley de extranjería por parte del PP, después de que el Gobierno rechazara la ayuda de la UE: «Los problemas se resuelven estando en la mesa, dialogando, hablando..». Así, ha reclamado un «acuerdo de país» en materia migratoria, y ha pedido al Gobierno central y a los populares que se entiendan.

Respecto al sistema de financiación, se ha mostrado a favor de que se modifique el modelo por estar «obsoleto», pero que se haga «con transparencia y contando con todos los agentes intervinientes, todas las comunidades». Y ha coincidido con una mayoría de presidentes regionales al afirmar que no apoyará ningún «tratamiento singular ni bilateral» ni que haya «comunidades de primera y de segunda».