Abascal traslada a sus socios en la UE su preocupación ante el Gobierno «más corrupto y extremista» de Europa

Santiago Abascal ha participado este jueves en la cumbre organizada por su grupo en la Eurocámara Patriots, la primera antes de un Consejo Europeo, que se celebra estos días en Bruselas para abordar entre otras cuestiones la crisis migratoria.

Desde el punto de vista nacional, tal como ha señalado en declaraciones a los medios después de la reunión, ha trasladado a sus socios su preocupación por el hecho de que hoy España «padece el Gobierno más corrupto de Europa», recordando los casos que están siendo investigados en los tribunales en lo que respecta al PSOE y al Gobierno, a la mujer de Pedro Sánchez, Begoña Gómez, y su hermano, David Azagra, así como también la imputación por parte del Tribunal Supremo del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, y el Gobierno «más extremista», en alusión a sus pactos con Bildu o el aplauso que recibió Sánchez del grupo terrorista Hamás.

Por otro lado, Abascal ha mostrado su deseo de que se repita la mayoría alternativa que se vio hace unas semanas en la votación por reconocer a Edmundo González presidente electo de Venezuela entre populares, conservadores y patriotas: «Hay otra Europa posible», ha afirmado, en contraposición a la actual alianza de populares y socialistas que viene denunciando Vox. Una mayoría alternativa que podría producirse, por ejemplo, en las políticas migratorias.

En este sentido, ha destacado que líderes «globalistas» como el popular Donald Tusk, haya planteado la suspensión del derecho de asilo, o que dirigentes socialdemócratas ahora gobernando están viendo la necesidad de endurecer su política migratoria. Y ha remarcado la movilización y la reacción en muchos países europeos ante las políticas migratorias hasta ahora llevadas a cabo, que se ha traducido en que muchos de los socios de Vox en Europa se hayan convertido en primera fuerza o hayan crecido.

Preguntado sobre la cuestión que se debate en la UE relativa a los centros de inmigrantes fuera del territorio comunitario, una propuesta impulsada por Giorgia Meloni y que ahora estudia la presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, si bien ha señalado que no han tratado este tema concreto, ha indicado que la considera una medida «explorable», aunque ha pedido ir a la raíz: «Lanzar el mensaje de que quien entre ilegalmente no tendrá un futuro aquí».

Abascal ha subrayado que son partidarios de que se intente hacer «todo lo posible» para detener la inmigración masiva, y que lo principal es combatir las mafias del tráfico de personas, vigilar los mares y las fronteras tanto exteriores como interiores de la UE, para evitar que la inmigración ilegal circule dentro del territorio comunitario libremente, y fundamentalmente lanzar ese mensaje de que «quien entre ilegalmente en España y en Europa no podrá ser nunca regularizado».