'Financial Times' critica las incoherencias de Sánchez: «Sus giros y vueltas pueden parecer un desafío a la lógica»
El medio retrata a Sánchez como un «disidente errático», un presidente «no fiable» en su palabra, y un «táctico», que solo sirve a sus propios intereses
Las incongruencias del Gobierno de Pedro Sánchez en materia de política exterior han llegado hasta las páginas del diario económico de referencia Financial Times.
En un artículo de opinión publicado este domingo, el periodista que lo firma, Barney Jopson, destaca los sinsentidos del presidente al apoyar unas causas públicamente para luego hacer lo contrario con las mismas y otras parecidas.
Jopson enumera algunos casos como la posición del Ejecutivo con el conflicto en Oriente Medio, el apoyo a Ucrania o su abstención a los aranceles de los vehículos eléctricos de China. «Sus giros y vueltas pueden parecer un desafío a la lógica», comenta.
El autor echa en cara a Sánchez que éste, abandonando toda neutralidad, reconociera formalmente el Estado palestino en mayo, pero luego apoyara a Marruecos en la no independencia del Sáhara Occidental. «Sánchez abandonó la tradicional neutralidad de España en un giro de 180 grados en 2022, apoyando un plan marroquí para dar más autonomía a la región, pero manteniéndola bajo el control de Rabat. (...) El apoyo de Sánchez a los palestinos contrasta con su posición sobre el Sáhara Occidental, una región que busca independizarse de Marruecos», argumenta Jopson
Respecto al tema ucraniano, Financial Times destaca una nueva incongruencia. «Sánchez es un claro defensor de la OTAN y de Ucrania, y este año ha concedido 1.000 millones de euros de ayuda militar a Kiev. Sin embargo, España ha tardado en entregar a Ucrania tanques Leopard, se ha negado a entregar un sistema de defensa aérea Patriot y gasta menos en defensa como proporción del PIB que cualquier otro miembro de la OTAN», contrastan.
También nombra la ruptura de España con otros países de la UE en cuestiones relacionadas con la inmigración o las relaciones con China. «Los miembros de la UE aprobaron este mes los aranceles a los vehículos eléctricos y España acabó absteniéndose», cuenta Jopson, quien añade que la estrategia de Sánchez vino «para no molestar a Pekín».
Un «disidente»
Haciéndose eco de declaraciones de otros políticos, diplomáticos y estudiosos, el medio retrata a Sánchez como un «disidente errático», un presidente «no fiable» en su palabra, y un «táctico», que solo sirve a sus propios intereses y totalmente alejado del bien común de los países de la UE.
«Lo más sorprendente es cómo se ha opuesto a otras potencias de la UE en cuestiones como las de Israel, China y la inmigración, lo que marca una ruptura con la aversión de España al conflicto diplomático», escribe Jopson, quien no termina de confiar en que esta postura inconformista del presidente español vaya a servirle a futuro.